Patricio Melero y proclamación de Piñera: "Aspiramos a ser un pilar trascendental del nuevo Gobierno"

El diputado y otrora timonel de la UDI, Patricio Melero, asistirá mañana al puntapié inicial de la candidatura presidencial de Sebastián Piñera en Santiago, ad portas de la proclamación de este viernes por parte del gremialismo. Reconoce que un "liderazgo muy dominante" de Piñera pavimentó el escenario para que el partido no levantara otra carta presidencial, y respecto a la negociación parlamentaria -que encabezó en 2013 como líder de la UDI- advierte que la prioridad es conseguir una mayoría en el Congreso que sustente a un posible nuevo Gobierno del sector, más que los partidos emergentes del conglomerado "crezcan" en base a ese espacio.

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El viernes ustedes, al igual que 2009, proclamarán a Sebastián Piñera como carta presidencial. ¿Qué ha cambiado en la relación con el ex mandatario?

-La diferencia de esta vez con el 2009, es que será la proclamación de un segundo Gobierno de Sebastián Piñera que trae la experiencia de su primer Gobierno, un buen diagnóstico de los errores y los aciertos, y una mayor disposición de los partidos para entender lo complejo y difícil que va a ser gobernar en esta oportunidad. Y en la persona de Piñera: un mejor político, una persona más cercana y que está consciente de las dificultades que tuvo en su Gobierno anterior y los errores que cometió.

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Tras dejar La Moneda, en la UDI insistieron que habían sido el puntal de la anterior administración. ¿Aspiran a retomar ese rol en un potencial nuevo Gobierno de Piñera?

-Hoy día la coalición Chile Vamos es más amplia que en el Gobierno pasado. Tenemos nuevos socios como lo son el PRI y Evópoli, y a lo que aspiramos es a ser un pilar trascendental del nuevo Gobierno, pero sin establecer hegemonías o tratamientos de privilegios, sino más bien ser considerados en las ideas fuerza y en la tarea de gobernar. En especial en lo que va a ser la relación con el Parlamento que, adelanto, va a ser compleja.

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¿La UDI falló al no ser capaz de levantar una carta propia competitiva o estuvieron siempre a la espera del retorno de Piñera?

-Sinceramente, no considero que haya una falla, sino la disposición de una realidad que fue siempre el liderazgo muy dominante de Sebastián Piñera en la centroderecha y la disposición de él de volver a competir. Ese sólo hecho no alentó que pudieran levantarse otras candidaturas y a nosotros nos pareció que no era necesario levantar una con el sólo fin de posicionar a la UDI ante la sociedad. Más bien era mejor buscar la unidad en una tarea que consideramos superior: evitar un nuevo gobierno de la Nueva Mayoría y trabajar en la recuperación de lo perdido en estos cuatro años.

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¿No se hipoteca el peso del partido al no poder levantar liderazgos? Además, luego del triunfo de Jacqueline Van Rysselberghe se habló que la generación de "recambio" quedó en pausa. ¿Cómo lo ve?

-La figura de Jaime Bellolio, junto a los alcaldes, concejales jóvenes y otros parlamentarios constituyen, sin duda, una generación de gran potencialidad a futuro que también entendió que ésta no era su hora. Que había que sumarse a un proyecto más colectivo dada la magnitud de la tarea que hay por delante y lo desastroso que ha sido el gobierno de la Nueva Mayoría. Acá no hay una generación hipotecada, sino un proyecto colectivo que nos suma a todos.

¿Está de acuerdo con Hernán Larraín respecto a que Piñera debe garantizar la separación total de sus negocios, y que el esfuerzo que hizo en su Gobierno no fue completo?

-Creo que los énfasis de gente de nuestro sector, en esta materia, le hacen daño a la figura de Sebastián Piñera, porque considero que él es el primer convencido que tiene que dar ese paso. Y los llamados, dejan la posible interpretación como si él no quisiera hacerlo. Tengo la convicción que cuando Piñera proclame su candidatura presidencial, una de las primeras cosas que va a hacer es dar plena garantía y va a hacer un fideicomiso, de forma tal, que no quede duda alguna.

¿En la UDI impulsarán que incluya sus inversiones en el extranjero? ¿O los negocios de su familia? Pregunto porque la Ley sobre Probidad en la Función Pública sólo apunta a sociedades anónimas o títulos de oferta pública en Chile, excluyendo movimientos en el extranjero.

-Mire, hoy día las suspicacias son muchas y la gente duda de todo. Sebastián Piñera lo que tiene que hacer es cumplir con la ley, y en esta materia habla bien de él que haya estado dispuesto a hacer voluntariamente un fideicomiso ciego, sin ley alguna cuando asumió la presidencia la vez pasada. Se desvinculó, no sólo de sus negocios, sino que vendió LAN o Chilevisión los que pudieran haber tener conflictos de interés con el Estado. Tengo plena confianza de la capacidad de él de dar plenas garantías.

¿Es un riesgo que la campaña presidencial termine judicializándose con las investigaciones en curso contra Piñera?

-Es un riesgo, pero mientras más golpean a Piñera, más lo hacen crecer.

Usted vivió la anterior negociación parlamentaria de 2013. ¿Cree factible una lista única parlamentaria en el sector, asumiendo que Evópoli quiere un trato equitativo en cupos y competir en todos los distritos?

-Hay que procurar el mayor grado de unidad y ojalá una sola lista. Pero no sería un drama que termináramos en dos subpactos. Es legítimo el derecho de los partidos emergentes de aumentar su participación, pero no es aceptable que se haga forzando el buen resultado electoral. Lo que importa es cómo Chile Vamos desarrolla una estrategia parlamentaria que ojalá nos permita tener mayoría en el Parlamento, porque eso va a ser la base para darle gobernabilidad a Piñera en La Moneda. No entender eso en la negociación y pretender que el objetivo de los partidos sea crecer, es no entender la responsabilidad que tenemos de dar un parlamento que asegure una mayoría.

Cuál debería ser el criterio, ¿encuestas?

-Sería una torpeza debilitar algún sector o distrito que esté bien defendido por parlamentarios actuales, con el fin de darles cupo más allá de lo razonable a una candidatura, que más bien, lo que busca es crecer como partido. Ese es el eje que debe, a mi juicio, dirigir la negociación. Hay que partir por reconocer la historia y el posicionamiento que los partidos y los parlamentarios tienen en esas zonas. Eso no es un privilegio, es un derecho bien ganado con trabajo y triunfos en elecciones pasadas. No podemos desperdiciar ese esfuerzo, más aún con un sistema que ha hecho los distritos muy grandes y a las figuras nuevas les va a costar mucho darse a conocer, más aún con las restricciones presupuestarias que la ley impone. Tenemos que aprovechar lo que hoy día tenemos posicionado y darles espacio a los demás partidos de la alianza.