Estudio muestra más de 4.000 ataques de animales a trabajadores: casi la mitad corresponde a arañas, abejas, avispas y fauna marina

En el marco de la entrada en vigencia de la Ley de tenencia responsable de mascotas, la Asociación Chilena de Seguridad (ACHS), realizó un estudio que detalla los ataques sufridos por trabajadores en Chile. La investigación realizada durante 2018 registró 4.699 accidentes relacionados con ataques animales. El 57% corresponde a mordeduras de perros, el 15% ataques de araña, el 11% picaduras de abejas o avispas y un 17% corresponde a animales agrícolas, aves y fauna marina.

Claudia Segura, especialista senior ACHS, señala que los animales atacan por cinco motivos: "Cuanto se siente invadido, cuando siente amenazada su comida, cuando ve peligro para sus dueños, cuando padece alguna fobia y por ansiedad o miedo por lo desconocido".

Los rubros económicos más afectados son, en primer lugar, el comercio y retail, segundo el sector industrial, luego energía y telecomunicaciones, y finalmente educación.

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La cifra de los perros es preocupante (2.678), ya que marca un crecimiento de un 22%. En el estudio anterior la cifra era de 2.195. "Se atribuye principalmente al incremento de la presencia de perros sueltos en las calles. Según cifras de las Subsecretaría de Desarrollo Regional, en Chile hay aproximadamente 255.000 perros y 88.000 gatos sin dueño que deambulan por las calles en busca de alimento y refugio, lo que genera un serio problema de seguridad y salud para la población", establece Segura.

Mientras que en cuanto a género, los hombres son los que más sufren este tipo de eventos con un 64%. Las mujeres un 36%. "Esto se debe a que los hombres realizan labores más expuestas al ataque de animales, como carteros, vendedores de terreno, operarios industriales, guardias de seguridad, profesores y auxiliares de establecimientos educaciones, conductores y trabajadores agrícolas", añade Segura.

El responsable es el ser humano, no el animal. "En el caso de perros domésticos, el humano es siempre el responsable de su cuidado y educación, para que socialmente conozca sus límites y tolere la presencia de otras personas. Expertos señalan que el 80% de su conducta es adquirida y solo el 20% es biológica. En el caso de animales que no son domésticos, muchas veces por trabajo invadimos su territorio, por lo que al verse amenazados, ataca. Un animal nunca ataca porque sí", agrega Segura.

La rabia es una de las principales amenazas, "enfermedad mortal que puede ser prevenida a través de una oportuna profilaxis post exposición en un centro de salud", señala López.

La doctora Gabriela López, Médico Jefe Servicio Urgencia Hospital del Trabajador, señala que se registran distintos tipos de lesiones. "El tipo e importancia de ésta varía, ya que puede ser desde una herida simple a lesiones que requieran cirugía. Algunas de estas pueden tener como consecuencia transmisión de enfermedades y/o contaminación bacteriana. La mayoría de las mordeduras son provocadas por animales domésticos y, dentro de ellas, la más frecuente es la causada por perros".

Las lesiones más comunes relaciones con mordeduras, "pueden ser abrasiones, heridas punzantes y laceraciones con o sin avulsión de tejido", establece la profesional de la salud.

Con respecto al proceso una vez en el hospital, "el manejo inicial del paciente es primero la estabilización, posteriormente se realizará anamnesis dirigida. Se debe consignar el tipo de accidente, motivo del ataque y si fue realizado por un perro identificable y observable (preguntar por el estado de vacunación anti-rábica y los controles veterinarios). Además, es necesario consignar el esquema de vacunación anti-tetánica del paciente. La herida debe ser lavada con abundante solución fisiológica, se debe evaluar caso a caso la necesidad de sutura y la antibioprofilaxis según las características de las heridas", agrega López.