Arturo Vidal devuelve las celebraciones al Barcelona tras 98 días

Se acabó la espera de Arturo Vidal. El chileno dijo presente con un gol este sábado en la victoria del Barcelona por 0-4 en el regreso de la competición después de 98 días del último partido oficial de los culés debido al coronavirus.

Ante un estadio vacío como medida de seguridad sanitaria, los azulgranas volvieron a demostrar su poderío en la competencia local y así aseguraron una nueva semana en lo más alto de la clasificación.

Vidal Volvió a ser titular una vez más, participando del juego de forma activa en el centro de la cancha, mostrando su empuje y presencia al rival durante el primer tiempo, pues fue sustituido en los 46 por Ivan Rakitic.

La primera etapa comenzó con un dominio total del Barcelona. Desde el saque inicial los azulgranas mantuvieron el control de la pelota. Frankie de Jong pareció perder el control del balón en el sector izquierdo pero alcanzó a recuperarse y ceder a Jordi Alba. Este último envió un centro alto al área, lugar donde apareció Arturo Vidal para convertir en los 2′ la apertura de la cuenta.

Un gol que llegó justo después de que en una entrevista con el medio español El Periódico pidiera que lo valoraran como jugador. “Me gusta jugar, me gusta sentirme importante. No digo todos los partidos, pero sí esos los que son claves, los que ayudan a ganar títulos”, indicó el chileno.

"En el estadio y en la calle la gente me hace sentir muy querido. Les gusta que me deje la vida, aunque en la prensa siempre se dice lo del ADN Barça", continuó indicando el chileno.

Tras el 0-1 el dominio de la visita siguió siendo evidente. Con Lionel Messi y Antoine Griezmann como referente del área, la proyección del chileno lo posicionó como una opción más de gol, sumando un par de cabezazos en los primeros 15' y ayudando en presionar la salida de Mallorca.

La primera réplica interesante del local llegó recién en los 22' a través de un contragolpe liderado por el japonés Takefusa Kubo. El delantero se perfiló para sacar un remate cruzado desde el sector derecho que fue desviado de buena manera por el portero alemán Ter Stegen.

Con el correr de los minutos, el Barcelona pareció caer en la tranquilidad extrema por el dominio de la pelota que les ofreció Mallorca. Esto por momentos pareció afectarles a los azulgranas, pues en los momentos en que la pelota quedaba en los pies de los locales estos atacaban de forma directa, complicando a la defensa culé.

Esta situación pareció cambiar después de un momento de hidratación dado por el juez del partido. En los 37' el danés Martin Braithwaite capturó el balón a la altura del punto penal tras un cabezazo de Messi y decretó el 0-2.

El punto malo para Vidal fue el recibir una tarjeta amarilla en los 42' por una falta cometida tras llegar a destiempo a la lucha por un balón. Esto pudo acelerar la decisión de Enrique Setién de sacarlo antes del inicio del segundo tiempo.

Sobre el desempeño del chileno, Sport lo calificó como “enchufado”. “Salió como una moto y marcó en el primer minuto entrando desde atrás con potencia. No se notó que llevaba tres meses sin jugar y vio una amarilla por una entrada contundente”, destacaron.

A su vez, Mundo Deportivo escribió: “Invitación personal de Setién a ser una pieza determinante en este frenético sprint Obtuvo respuesta al primer minuto, entrando como un tanque para marcar el 0-1 de cabeza”.

Ya en la segunda mitad, el Barcelona siguió teniendo el control del balón y el DT azulgrana aprovechó de darle minutos a Luis Suárez, quien ya se recuperó de una lesión en la rodilla derecha. De hecho, el uruguayo entró con todo. En los 66′ realizó una corrida rápida para evitar que la pelota se fuera por el fondo de la cancha y habilitar a Lionel Messi. Sin embargo, la defensa de Mallorca estuvo atenta para evitar un nuevo tanto.

El peso del retorno a la actividad pareció manifestarse en los últimos 20 minutos con una gran baja en el ritmo de la competencia, dejando algunos chispazos. Uno de ellos, en el 79, permitió que Messi asistiera a Jordi Alba para que colocara el 0-3 en el marcador.

El partido se cerró en los 90+3′. Luis Suárez habilitó a Messi, quien se acomodó para sacar un remate con la pierna derecha, batiendo la resistencia del portero.

De esta manera, el Barcelona se mantiene en el primer lugar de la tabla con un total de 61 puntos y queda a la espera de lo que pueda hacer el Real Madrid este domingo. Los Merengues, que acumulan 56 unidades, se enfrentarán al Eibar de Fabián Orellana con la misión de mantener la distancia al cierre de la fecha.