Sin más preámbulos, Lamborghini descubre el formidable Countach LPI 800-4, la representación moderna de la leyenda

Adosado al chasis, el heredero de la cincuentenaria historia de Lamborghini lleva un V12 atmosférico 6.5 litros, que, ayudado esta vez por la fuerza de la electricidad, pone 814 caballos para la emoción.




Todo muy veloz, como muchas de las cosas que suceden en Sant’Agata Bolognese. Así fue el desarrollo de la trama que hoy tiene de regreso al Countach en la manada taurina de Lamborghini. Y es que claro, el lunes la marca anunció que haría renacer su aclamado superdeportivo V12 del 70, el jueves exhibió los primeros teasers y hoy viernes lo presentó: se llama Lamborghini Countach LPI 800-4, y es una máquina futurista de edición limitada, que rinde homenaje al espíritu icónico del Countach que rompió todas las reglas de diseño cuando irrumpió en 1971.

Respecto del nuevo Countach, los italianos señalan que sus formas puristas son inmediatamente reconocibles por permanecer fieles al padre de los superdeportivos modernos (con permiso del Lamborghini Miura, por cierto).

Adosado al chasis, y tal como su cincuentón alter ego, la nueva obra italiana está presidida por un motor V12 atmosférico 6.5 litros, aunque esta vez viene combinado con la tecnología híbrida de supercondensadores de Lamborghini. Así, el Countach LPI 800-4 conserva la experiencia y el sonido inimitables del motor V12 montado en posición “Longitudinale Posteriore” (LP), pero combinándolo con la tecnología híbrida desarrollada en principio para el Lamborghini Sián (se develó en 2019).

Con una potencia máxima combinada de 814 caballos (redondeada a 800 en su nombre), que proceden de su propulsor atmosférico (780 Hp) y de su motor eléctrico (otros 34 caballos) y transmitidos a un sistema de tracción permanente a las cuatro ruedas, el Countach LPI 800-4 desarrolla las prestaciones propias de todo Lamborghini, con una aceleración de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos, un 0 a 200 km/h en 8,6 segundos y una velocidad máxima de 355 km/h.

“El Countach LPI 800-4 es un auto visionario, como lo fue su precursor”, afirma Stephan Winkelmann, Presidente y CEO de Automobili Lamborghini. “Uno de los íconos automovilísticos más importantes no solo refleja el principio de diseño e ingeniería de Lamborghini, sino que representa nuestra filosofía de reinventar los límites, lograr lo inesperado y extraordinario y, lo más importante, ser ‘material para los sueños’. El Countach LPI 800-4 rinde homenaje a este legado”.

Un Countach propiamente tal

Automobili Lamborghini se detiene en un punto importante: el nombre Countach -una expresión del dialecto piamontés y que se pronuncia ‘Coon-tach’- es uno de los pocos nombres entre los modelos de Lamborghini que no está relacionado con la tauromaquia. Se traduce como algo que causa sorpresa y asombro, lo mismo que hoy el nuevo Countach ha intentado impregnar con su inesperado estreno.

Esta reinterpretación mantiene el diseño de cuña invertida que luego sirvió de inspiración para los superdeportivos venideros no solo de la marca. Destacan un habitáculo inclinado de líneas rectas con visuales delanteras y traseras muy limpias. Por ejemplo, no hay un alerón trasero fijo que desentone en la pureza. Asimismo las tomas de aire -para refrescar aquel gran corazón- se integran a la perfección en los musculosos hombros del auto, adornados con las distintivas ‘branquias’ del Countach.

El acceso para el conductor y el pasajero se realiza, por supuesto, a través de las famosas puertas de tijera, introducidas por primera vez en el Countach y que se han convertido en una firma de los V12 de Lamborghini.

El chasis monocasco y todos los paneles de la carrocería son de fibra de carbono, lo que proporciona una solución óptima de ligereza, así como una excepcional rigidez torsional: el Lamborghini Countach LPI 800-4 tiene un peso en vacío de 1.595 kg, por lo que su relación peso/potencia es de 1,95 kg/Hp. Los elementos de fibra de carbono visibles del exterior se pueden apreciar en el splitter delantero, alrededor del parabrisas y los espejos retrovisores, las tomas de aire del capó motor y las taloneras, teniendo también presencia en detalles específicos del interior. Los airvents móviles, fabricados con tecnología de impresión 3D de última generación, y un techo fotocromático -que cambia de opaco a transparente con solo pulsar un botón- dan la impresión de que este bólido, a pesar de su notoria inspiración histórica, será recordado también como uno de los mitos automovilísticos del siglo XXI.

Así fue su presentación en el Monterey Car Week:

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