Internas recibieron junto a sus hijos al Papa Francisco en CPF de San Joaquín

papa

En medio de su visita, quien representó a las reclusas, pidió perdón a la sociedad y solicitó al Pontífice que rece e interceda por ellas.




En medio de gran emoción y acompañadas de sus hijos, la tarde de este martes las internas del Centro Penitenciario Femenino de San Joaquín recibieron al Papa Francisco. 

Prepararon varios meses la bienvenida y decoraron con dedicación el recinto. Flores de papeles, grullas y lienzos que contenían frases dichas por el Pontífice daban color al ambiente y lo hacían acogedor.

La primera en tomar la palabra fue la hermana Nelly León, capellana del CPF, quien además de agradecer la visita del líder de la Iglesia Católica realizó una dura crítica al sistema: "En Chile se encarcela a la pobreza". 

"Gracias por estar aquí, junto a las personas más olvidadas del país (...) Querido Papa, en este gimnasio somos un poco más de 400 mujeres, pero hoy estas mujeres representas los casi 50 mil hombres y mujeres pobres y vulnerables privados de libertad. Digo pobres, porque lamentablemente en Chile se encarcela a la pobreza", sostuvo León.

Pese a que están privadas de libertad, como sostuvo la capellada, las reclusas se sienten animadas por los mensajes que el Pontífice ha entregado. "Desde esta cárcel, tal como lo celebramos cada domingo, testimoniamos la certeza de que la vida triunfa sobre la muerte", manifestó.

"Dios está de nuestra parte, de parte de los pobres y marginados, por eso su presencia nos viene a confirmar el camino que hacemos desde la cárcel a la libertad", puntualizó.

En la misma línea, Jeannette Zurita, quien representó a las internas del penal, manifestó su agradecimiento hacia el Papa y reconoció que para ella es una bendición poder hablar en nombre de quienes se encuentran privados de libertad.

En su discurso, Zurita aseveró que Dios es quien las levanta, pues muchas viven con el dolor de haber dejado hijos fuera del penal. "Los niños son los que más sufren cuando se les arrancan del lado de su madre. Nada ni nadie reemplaza a una madre, arrastramos a nuestros hijos a vivir presos, presos de sus sueños truncados, los obligamos a cometer los mismos errores, crecen con su corazón lleno de dolor y resentimiento", sinceró.

Reconociendo que han cometido errores, pidió perdón a la sociedad y a quienes han herido con sus delitos, pero también solicitó al Pontífice misericordia y que rece por todas ellas y por sus hijos.

Asimismo, Zurita pidió al Papa Francisco que interceda para que el sistema de justicia modifique las condenas para las mujeres que son  madres de menores de edad, "para que podamos pagar la deuda sin descuidar ni abandonar a nuestros niños, evitando que en el futuro sean ellos los condenados".

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.