Valenzuela y Viale se reconcilian tras nueve meses separados

Fue una separación breve, pero tormentosa y con escándalos y peleas en la calle. Pero volvieron. Tras un quiebre que duró nueve meses, Gonzalo Valenzuela y Juanita Viale viven una reconciliación. El actor de teleseries y la argentina nieta de Mirtha Legrand están viviendo un período de acercamiento, solución de problemas e intento de una segunda convivencia. Se están dando una nueva oportunidad.

Todo lo planeó el padre y la abuela de ella, la mujer que a los 82 años convida a su programa Almorzando con Mirtha Legrand, en América TV, a todos los vip de su país. Allí Valenzuela dijo hace dos semanas que estaba "muy enamorado". De Viale, supuestamente. Aunque luego aclaró, jugando, que era de su hijo. Porque la estrategia de la matriarca del clan para renunirlos funcionó, como consignan las revistas argentinas Caras y Gente. Lo primero que hizo ella fue invitar a un té a Juana, la joven de 27 años que en abril pasado dejó a Valenzuela tras cuatro años de intenso romance y se fue con su hija mayor y Silvestre, el hijo de un año y ocho meses que tienen. En ese té, Legrand le pidió a su nieta -a la que compró un departamento en  el exclusivo Barrio Parque- que lo reconsiderara. Que Valenzuela se lo merecía. El chileno se había ganado su cariño y el de toda la familia. No era la primera vez que la animadora lo invitaba a su espacio, donde cada vez que puede comparten una extensa lista de halagos y bromas. Y Viale le hizo caso.

LOS ENCUENTROS
El actor de Machos -y que en Argentina vive un buen momento por su participación en la teleserie Botineras- se mostró hace una semana junto a Viale en el cumpleaños del presidente del Comité Olímpico argentino, Gerardo Werthein, donde se le vio abrazados y besándose, como relata revista Gente. Luego se fueron al nuevo bar Isabel de Buenos Aires, de un amigo de Valenzuela. Y el ex rostro de Canal 13 estuvo todo el sábado y domingo pasados en el departamento de la actriz de Radio corazón, como detallan las publicaciones transandinas. Cada uno entró, salió y regresó por su cuenta. Aunque el domingo se les vio abandonar el lugar juntos, en el auto de ella, que no ha dicho ni una palabra del reencuentro. Tal como antes no habló del affaire que tuvo con el tenista Gastón Gaudio, con quien compartió durante meses tras dejar a Valenzuela. Siempre cuidándose de los paparazzi, que de todas maneras lograron fotografiar un fuerte impasse de la pareja en julio.

Ese fue el momento más amargo de la separación de Viale y Valenzuela. Cuando durante un fin de semana en pleno invierno un reportero captó la riña que tuvieron en la calle. Fue una carrera de autos donde él la siguió por varias cuadras, impidiéndole el paso y enfrentándose a gritos, al mismo tiempo que la argentina vivía el peak de su romance con el tenista. Las imágenes fueron publicadas por revista Semanario. Pero luego la situación se calmó. La relación terminó. Y aprovechando la desilusión de Viale con el deportista, el conductor del programa Humanos en el camino, de Chilevisión -quien no contestó ayer su teléfono- volvió a acercarse.