Cuarentena en imágenes: “Me preocupa el invierno. Me han dicho que el primer invierno en el sur es el más difícil”

Invitamos a distintas fotógrafas a retratar su nueva realidad cotidiana durante la cuarentena. Esta es la mirada de Trinidad Ríos.




“Todos los días suena la alarma a las nueve de la mañana. Me cuesta levantarme. Fe ya se levantó y le abre la puerta a Menina que pide salir. Abre las cortinas y yo me quedo mirando los arcoiris del cristal que cuelgan en la ventana.

Intentamos que cada desayuno sea diferente al del día anterior. Me levanto y saludo a Menina. La toco y la siento calientita. Me pongo al sol junto a ella. Agradezco poder hacerlo, ya que lo necesito.

Me preocupa el invierno. Me han dicho que el primer invierno en el sur es el más difícil.

Como fotógrafos de matrimonio marzo y abril son los meses más ocupados para nosotros, por lo que no esperábamos estar en casa en esta época, sino en Santiago trabajando. Vinimos por 3 días cuando se cancelaron todos los matrimonios de la temporada y tuvimos que quedarnos.

Felipe me llama, el desayuno está listo. Llegan los perros de los vecinos a saludar, nos saltan y llenan de tierra la casa. ¡Nos encanta que vengan!

Terminamos de comer y Felipe lava la loza, él siempre lava. La verdad que estar en cuarentena no ha cambiado mucho nuestro día a día. Nuestra vida es tranquila. He ordenado, maestreado, jardineado. Trabajado, la verdad es que poco. Prefiero dejarlo para los días nublados.

Soy mala para organizarme y siempre he lidiado con las ansias de querer hacer todo y no lograr hacer mucho. Pero ahora, al leer que a tanta gente le pasa lo mismo, me siento menos culpable.

También me trato de controlar para no estar tanto tiempo en el celular, pero hay días que me cuesta dejarlo. A veces el tiempo pasa rápido mirando la pantalla y no me doy cuenta. Me absorbe y eso me enoja. Por lo mismo, me obligo a hacer otras cosas. Trato de dibujar, lo que me tranquiliza y enfoca.

Como vivía lejos, estoy acostumbrada a tener una relación de distancia con mi familia y amigos. Saber de todos por teléfono y verlos por pantalla. Pero sin duda lo más difícil ha sido vivir al lado de mi sobrino y no poder verlo como quisiera. Tiene 3 años y no entiende mucho. “No me puedo quedar, estoy enferma, te puedes contagiar”, le digo a dos metros de distancia. No es cierto, pero de alguna forma debo graficárselo.

Aquí al lado hay un río y todos los días caminamos hacia él. No vemos a nadie. Solo a los perros que nos siguen. Somos afortunados y lo tenemos claro. Poder salir, disfrutar del sol en la piel todos los días. Correr. Escuchar el viento, los pájaros. Ser testigos de la llegada del otoño. Eso es todo lo que necesitamos en estos tiempos. Y siempre.

El lugar que hemos elegido para vivir es la mejor decisión que habíamos podido tomar a pesar de que logísticamente es complejo, sobre todo para nuestros trabajos. Pero me siento muy agradecida de estar donde estoy.

Cuando pase mi primer invierno se los volveré a confirmar".

Trinidad Ríos (@triniriosl), vive con Felipe, su marido, y Menina, su perrita. Los últimos 10 años vivieron en Salvador de Bahía y actualmente pasan su cuarentena en el sur.

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