¿Qué es el fenómeno de La Niña Costera y cuáles serían sus efectos en Chile?

Con el debilitamiento de El Niño, se acerca un nuevo evento climatológico al país, el cual se presentó por última vez en 2018, y su llegada podría traer varias consecuencias meteorológicas.


Este 2024, los expertos señalan que el Fenómeno de La Niña se acerca para hacerse presente, dejando atrás al Fenómeno del Niño, el cual ya está en una etapa de debilitamiento.

Según la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), aseguran que este último se prolongará hasta el mes de abril.

Por su parte, el Fenómeno de La Niña iniciaría el segundo semestre de este año y afectaría de diversas formas. Raúl Cordero, climatólogo de la Universidad de Santiago, explicó que si este evento se desarrolla no son buenas noticias para Chile.

La Niña se asocia a años secos. Si La Niña se desarrolla en los próximos meses, es poco probable que este año sea tan lluvioso como el anterior”, añadió.

Junto con ello, este fenómeno meteorológico podría estar acompañado de otro evento: La Niña Costera.

¿Qué es la Niña Costera?

La Niña Costera, también llamada Fenómeno de La Niña Costera, es un evento climatológico que consiste en el enfriamiento anómalo de las aguas del Océano Pacífico Oriental Tropical en las proximidades de las costas sudamericanas, aunque afecta el clima desde el sur de California hasta el norte de Chile, y que repercute directamente en nuestro país.

El climatólogo Cordero explicó que hay varias zonas que se monitorean para definir eventos de El Niño o La Niña. “La zona que totaliza un millón de kilómetros cuadrados ubicada directamente frente a las costas de Ecuador y el norte de Perú se conoce técnicamente como la zona 1+2. Cuando esa zona del Pacífico presenta temperaturas bajo valores típicos se entiende que estamos en presencia de un evento de La Niña Costera”, añadió Cordero.

Este evento climatológico traería diversos efectos en Chile. El escenario más probable que enfrentará el país es el de un régimen deficitario en lluvias, especialmente durante la segunda mitad del año.

Por lo anterior, existen probabilidades de que el 2024 cierre como un año muy seco.

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