Columna de Gabriel Zaliasnik: El cuervo y los chacales



El cuervo es un pájaro de plumaje negro que se alimenta de la carroña, carne descompuesta de animales muertos. De allí que su tenebrosa aparición se asocie a la muerte. Los chacales son una especie animal igualmente carroñera que suele aparecer en el crepúsculo, parapetada en esas horas cuando la luz escasea. En lenguaje coloquial llamamos chacal a la persona agresiva y sin escrúpulos, peligrosa o dañina para la sociedad.

Este recuento zoológico viene al caso a la luz de la actualidad de nuestro país. Cuervos y chacales parecen presagiar un mal futuro. Es evidente como ante los reiterados tropiezos del gobierno surgen las aves de rapiña y los oportunistas depredadores, intentando obtener un pedazo de los cadáveres de las instituciones erosionadas.

Es así, como la reciente cadena de acontecimientos relacionados con el ámbito judicial debiera ser motivo de profunda reflexión. Los indultos presidenciales develaron cómo el Presidente Boric al intentar justificarlos, incurrió en una grave infracción constitucional. Tan grave que la Corte Suprema debió representarle la vigencia del artículo 76 de la Constitución que él debe respetar. Previamente sus llamados al presidente del máximo tribunal para incidir en el proceso de elección de fiscal nacional daban cuenta del mismo vicio. Como corolario, la nominación de un candidato que sorprendió al propio comité político de La Moneda, levantó la suspicacia por el súbito giro en las preferencias del gobierno en momentos en que se desataba la crisis política por los indultos. El bonus track de esta semana horribilis fue la renuncia de la ministra de Justicia.

Conviene entonces preguntarse en este líquido escenario a quiénes beneficia el control de los debilitados Ministerio de Justicia y Ministerio Publico. En la respuesta a esta interrogante se encuentra la clave para explicar el complejo momento. Las experiencias de Perú y Argentina nos ilustran. Es un error pensar que solo la fragmentación política y el desorden del Congreso en pugna con la autoridad presidencial expliquen la disfuncionalidad de Perú. El Poder Judicial y la lucha por el control de su Fiscalía ha sido parte importante de su deterioro institucional. En Argentina ocurre otro tanto. La “peronización” no solo estimula el clientelismo político, sino que el control del Poder Judicial. Así, es la institucionalidad completa la que está en juego como lo demuestra en Chile la oscura trama para designar fiscal nacional y reemplazar a la ministra de Justicia.

En palabras del escritor israelí Amos Oz, en su libro “Tierra de Chacales”, en épocas de decadencia, “aparentemente la corrupción y la pureza son completamente opuestas, pero en realidad una arrastra a la otra, y una posibilita y nutre a la otra”. Quizás, la corrupción endémica sea finalmente el triste legado de un gobierno que se autoproclamó portador de la pureza y la virtud.

Por Gabriel Zaliasnik,profesor de Derecho Penal,Facultad de Derecho U. de Chile

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