Titulación oportuna y trayectorias

SEÑOR DIRECTOR:

En la nota publicada el día 24 de octubre, titulada: “¿Cuánto duran realmente las carreras? Hasta 16,8 semestres demora obtener un título en la educación superior chilena”, se aborda la necesidad de que la gratuidad limitada a la duración formal de las carreras no es suficiente. Sin embargo, es pertinente mencionar algunos factores detrás de este fenómeno, y analizar por qué los estudiantes demoran en titularse. Es consenso que se debe hablar de titulación oportuna y no de la duración predeterminada de una carrera porque, como bien se señala en el artículo, hay factores que impactan en la trayectoria de un estudiante.

Existen vacíos estructurales que impiden a miles de jóvenes desempeñarse adecuadamente en su carrera, situación que muchas veces termina en la deserción de los estudios y, más grave aún, en abandono de toda posibilidad de realización profesional futura. Resulta fundamental entonces que la política pública aborde la problemática que existe hoy en la educación superior luego de haber derribado la barrera del acceso y, que tiene especial relación, con la falta de redes de soporte, bajo capital social y cultural, brechas académicas profundas, dificultades para generar relaciones y vínculos, bajo desarrollo de habilidades tecnológicas y tantas otras complejidades. Si queremos realmente “emparejar la cancha”, empecemos por reconocer a qué se enfrentan nuestras futuras generaciones para pensar y concretar sus proyectos de vida.

Si todos comenzaran en el mismo punto de partida, las dificultades de estas trayectorias estarían aminoradas. Debemos hacernos cargo no solo de pensar cuánto demoran en terminar una carrera universitaria, sino que también preguntarnos si existen las condiciones de soporte necesarias para que cumplan el sueño que les prometimos al acceder a la educación superior.

María Eugenia López

Directora Ejecutiva de Fundación Portas