15 rutas para pedalear en Santiago durante la franja deportiva

La banda de tres horas matinales —entre 6 y 9 AM— funciona como el último espacio de libertad para moverse sin trámites ni permisos. Para aprovecharla mejor, dos activistas del ciclismo urbano nos dieron sus trayectos recomendados para recorrer en bicicleta durante esos 180 minutos diarios.




La cuarentena no parece cuarentena: hemos visto cómo la movilidad, a pesar de que está restringida solo a los casos esenciales, apenas se ha reducido en las grandes ciudades. Mucha gente se ve obligada a moverse para generar algún ingreso, mientras otra tanta sale igual de su casa, quizá por hastío, cansancio o la falta de un espacio seguro para mantenerse confinada.

Como sea, el único momento en el que deberíamos salir con algo de confianza y libertad, la última que nos va quedando en estos oscuros momentos, es durante la franja horaria dispuesta en las mañanas, entre las 6 y las 9 AM, para hacer deporte. Por supuesto, no es obligación realizar un ejercicio intenso ni terminar extenuado: caminar, pasear al perro o darse una vuelta por una plaza, parque o playa también valen.

Pero para quienes justamente echan de menos el sudor y las endorfinas, también la velocidad y el viento pegando en la cara, este espacio matutino es una isla de movimiento en el océano de encierro por el que navegamos sin mucho rumbo.

¿Te gusta andar en bici pero no sabes dónde puedes ir y volver en solo tres horas? ¿Fuiste al San Cristóbal y saliste aterrado ante las multitudes atochadas ahí? Dos activos y experimentados ciclistas, miembros de comunidades dedicadas a promover el pedaleo seguro, entregan aquí algunas rutas recomendadas dentro de Santiago, para principiantes y avezados, que se pueden hacer con seguridad durante la franja deportiva.

Consejos

Paulina Barría, fundadora de la app Bikelite —conocida como el Waze de los ciclistas, ya que sugiere las rutas más seguras para pedalear a un destino—, celebra la existencia de este horario pero también recuerda mantener las precauciones antes de salir a andar.

Las principales son hacerse visible —usando buenas luces y reflectores—, ocupar una bici acorde a nuestras habilidades —no la más bonita sino la que mejor sepamos usar—, no preferir el camino más rápido sino el más seguro —ojalá donde no pasen micros ni camiones, y la velocidad máxima sea 30 km/h—, tratar de pedalear en compañía —para evitar robos y malos ratos—, y usar casco.

“¿Qué es un ciclista sin casco? Un donante de órganos”, dice Alfredo Irarrázaval, miembro del Ciclo Club, una de las agrupaciones de ciclistas más antiguas de Santiago. Parece un chiste cruel pero se basa en la dura realidad que han vivido muchos usuarios de bicicletas, 314 para ser exactos, que fueron víctimas fatales de siniestros viales solo el 2020.

“Aunque un casco no puede hacer mucho frente a un impacto directo a más de 20 km/h”, aclara Barría, “sí protege contra golpes y caídas, evitando lesiones que sino podrían ser muy graves”. En Bikelite, para prevenir estos siniestros y educar a las y los ciclistas de los riesgos más comunes —y evitables— en las calles, están lanzando una serie de cómics (como éste, enfocado en los puntos ciegos de los grandes vehículos) para describir esos pequeños detalles que pueden marcar la diferencia entre un viaje seguro y otro fatal.

Irarrázaval también aconseja, para quienes lleven mucho tiempo con la bici escondida en el balcón o el patio, irse con calma y retomar el ritmo de a poco. “Hacer un trayecto ambicioso a la primera puede ser frustrante. He visto a gente con bicicletas nuevas, de las caras, subiendo el cerro con el cambio más bajo, parecen batidoras pedaleando, creyendo que de inmediato van a bajar de peso”, dice. Esa experiencia, según él, puede terminar siendo frustrante más que estimulante.

“Mejor es ir de a poco, comenzar con tramos cortos, incluso dar vueltas por un parque. Si no hago ejercicio siempre, con 40 minutos de pedaleo ya está bien. No se necesita perder el aliento o quedar extenuado para que el ejercicio tenga efecto”.

Rutas

Todos saben lo mucho que queda por hacer, pero a pesar de los inconvenientes o precariedades, Santiago es una ciudad muy pedaleable. Sin grandes pendientes, con una red de ciclovías que se robustece de a poco, es posible agarrar la bicicleta desde distintos puntos y hacer trayectos largos, bastante planos y relativamente seguros.

De otra forma no se explica que cada vez sean más quienes se mueven en dos ruedas, tanto para trabajar, transportarse a sus destinos o simplemente por recreación. Y en esta franja horaria matutina es una gran opción no solo para ejercitarse, sino también para salir de nuestro entorno, conocer nuevos lugares y mirar la ciudad desde otro punto de vista.

“Hay muchas rutas que se pueden hacer en esas tres horas”, dice Irarrázaval. Al voleo se le ocurren fácil una decena, en los cuatro puntos cardinales de la capital. Paulina Barría, con la ayuda de Fusión Bike —una comunidad que organiza cicletadas y salidas grupales semanales—, eligió 19 trayectos, con distintas dificultades, para descubrir y aprovechar en este interminable cuarentena.

Rutas Zona Oriente-Centro

1. Cerro San Cristóbal

No es la ruta más original —así lo ha comprobado la gran cantidad de gente que se junta cada mañana en cada uno de sus ingresos— pero es un acogedor punto de partida para quienes buscan agarrar vuelo, principalmente por la variedad de sus trayectos, los distintos accesos que tiene y los distintos niveles de dificultad que presenta.

“La entrada de Pedro de Valdivia es como ir al mall”, advierte Alfredo Irarrázaval, pero igual no lo descarta como destino. Además, sentirse acompañado, o haciendo algo con más gente, aunque sean desconocidos, puede ayudar a atenuar el larguísimo aislamiento al que nos hemos sometido.

Se puede llegar sin mucha demora desde el norte, centro y oriente de Santiago, y una vez dentro hay varias opciones. Las distancias hasta la cumbre, por ejemplo, son de 6,9 km partiendo en La Pirámide (40 minutos), 5,5 km desde Pío Nono (30 minutos) y 4,3 Km por Pedro de Valdivia (25 minutos). La dificultad, según Barría, es media.

2. La Reina - Quinta Normal (Desde Sánchez Fontecilla hasta el Parque Quinta Normal)

“La idea de estos trayectos es que lleguen a un parque o área verde, donde poder hacer una pausa, hidratarse, estirarse, recrear la vista y luego volver con energía”, dice la creadora de Bikelite. En este caso, se trata de una ruta que comienza en la comuna de La Reina, en la calle Sánchez Fontecilla —que tiene una ciclovía en medio de un estrecho pero verde parque—, baja por la ruta de la Costanera Sur, pasa por el Parque Forestal, el de los Reyes y termina en la Quinta Normal. Son 12,3 km, en un 90% por ciclovía, que se hacen en aproximadamente 45 minutos, tiempo más que suficiente para ir y volver.

3. Las Condes - Bellas Artes (Desde Bilbao/Vespucio hasta Museo de Bellas Artes)

Esta ruta tiene una dificultad baja, ya que casi todo el trayecto se hace por ciclovías, y no hay mucha pendiente. Son 14,4 km de ida, comenzando en la ciclovía de Isabel la Católica/Pocuro, siguiendo por la de Antonio Varas hacia el norte, y luego por la Costanera Sur, llegando directamente al Parque Forestal. Entre Plaza Italia y el Museo de Bellas Artes, eso sí, la ruta es de maicillo.

Rutas Sur

4. Puente Alto - Pirque (desde Plaza Puente Alto hasta Santa Rita)

Son 16 km de ida y vuelta, partiendo en la Plaza de Puente Alto, con una dificultad media —ya que no hay ciclovías en este trayecto—, hasta llegar a Santa Rita, a pocos kilómetros del Río Clarillo. Una salida del entorno urbano, para alejarse del bullicio en poco más de una hora para llegar y volver.

Rutas Centro

5. Centro - Parque O’Higgins (Desde Miguel de Cervantes hasta Parque O’Higgins)

Es una ruta breve pero bien central. Se puede ir por la ciclovía de Rosas hacia el oeste, luego Teatinos al sur y desde ahí seguir por el Paseo Bulnes hasta el Parque Almagro, luego las calles más pequeñas de Zenteno, Aconcagua y San Ignacio, hasta la entrada del Parque O’Higgins por la calle Viel. Son 4,6 km sólo de ida, que se hacen en aproximadamente 30 minutos.

6. Bellas Artes - Quinta Normal

De parque a parque. Comenzando en el Forestal y terminando en el de Quinta Normal (o viceversa), son 5,5 km de ida que se pueden hacer, si se comienza en el Museo de Bellas Artes, por la ciclovía del 42k, al sur del Mapocho, saliendo en la ciclovía de Bulnes, hacia el sur, doblando por Rosas al oeste, pasando por la Plaza Yungay y llegando por ahí a Matucana, justo a una cuadra del parque. Son 40 minutos para ir y otros tantos en volver.

Rutas Centro - Sur

7. Santa Isabel - Cerrillos (Desde Iglesia los Sacramentinos hasta Parque Bicentenario de Cerrillos)

Se comienza en Santa Isabel con San Diego, en la neorromántica iglesia de Los Sacramentinos. Tomando la ciclovía hacia el poniente, que atraviesa la Norte-Sur y sigue por Gorbea hasta llegar a Exposición. Por esa calle, hacia el sur, hay otra senda que luego sigue por la Av Pedro Aguirre Cerda, la que nos deja, con algunas interferencias, directamente en el Parque Bicentenario de Cerrillos. Son 9,6 km de ida, que se recorren en unos 90 minutos aproximados.

Linea 6 Metro. Imagenes del Parque Bicentenario de Cerrillos Foto Andres Perez VISTAS GENERALES

8. Plaza Brasil - Pedro Aguirre Cerda (desde la Plaza Brasil hasta el Parque André Jarlán)

Otra ruta centro-sur, aunque más breve que la anterior, con solo 5,8 km de ida. En la Av. Brasil hay que dirigirse hacia el sur por su ciclovía, cruzar la Alameda y seguir por la de Almirante Latorre, que luego se transforma en Club Hípico. Al llegar al Centro de Justicia, se cruza el Zanjón de la Aguada, donde estará el futuro Parque Inundable Víctor Jara, se dobla un par de cuadras al poniente por Carlos Valdovinos y en Clotario Blest, donde hay otra ciclovía, hay que ir al sur hasta la entrada del Parque André Jarlán. Toma unos 45 minutos en llegar.

Rutas Poniente

9. Maipú - Padre Hurtado (desde Plaza de Maipú hasta Plaza Padre Hurtado)

Son 90 minutos partiendo en la Plaza de Maipú, tomando la Av. Pajaritos hacia el sur, que es más segura gracias al carril exclusivo para las micros, hasta el Camino a Melipilla. Por ahí, en dirección sur-oeste, se llega derecho hasta la Plaza de Armas de la comuna de Padre Hurtado. Son 9,3 km de trayecto, recomendado para ciclistas con algo de experiencia en calle, y demora unos 90 minutos.

10. Quinta Normal - Pudahuel (desde la Quinta Normal hasta el Parque Amengual)

Partiendo desde la Av. Portales hacia el oeste, hay que cruzar la Autopista Central, seguir por Nueva Imperial hasta empalmar con San Pablo. Por esa avenida hay que continuar hasta la calle Los Ediles, pasar por la Municipalidad de Pudahuel y entrar al Parque Amengual. Son 7,5 km sólo de ida, un camino que toma alrededor de una hora, aunque sin ninguna ciclovía.


Rutas Oriente

10. Tobalaba - La Pirámide. (Desde Costanera Center hasta acceso La Pirámide del Parque Metropolitano)

Esta ruta, ideal para quienes vivan en Providencia o Las Condes, se realiza sobre una excelente ciclovía y con una pendiente ligera pero marcada, suficiente para cansar a cualquiera. Comienza en Andrés Bello con Tobalaba, sube por la Costanera Sur hasta Américo Vespucio, donde después de cruzar el Mapocho por el puente Centenario, se puede llegar a La Pirámide. Son 4,9 km de ida, que se hacen en 20 o 35 minutos, dependiendo del ritmo.

11. Parque Bustamante - Ñuñoa (Desde Bilbao con Bustamante hasta el Parque Juan XXIII).

Este destino se podría trazar de distintas maneras: por calle para los más avezados o por ciclovías para quienes prefieran ir con más calma. En este segundo caso, se comienza por el Parque Bustamante hacia el sur hasta llegar a Marín. Por ahí se cambia la dirección al este y, en la Av. Salvador, se sigue por Pedro León Gallo/Puyehue y, en la esquina con Antonio Varas, doblar a la derecha y pedalear unas cuadras hasta Duble Almeyda. Esa ciclovía no es la mejor pero nos llevará hasta el Parque Juan XXIII, en el cual también se puede andar hasta casi encontrarse con Av. Grecia. El tiempo estimado son 35 minutos.

12. Parque Bustamante - Peñalolén (Desde el metro Irarrázaval hasta el Velódromo de Peñalolén)

Son 9,3 km para una ruta algo más difícil, debido a su distancia y pendiente. Ojo que para lograr realizarla ida y vuelta se necesita un buen ritmo de pedaleo y mantener una velocidad constante. Comienza en el Parque Bustamante, y se puede subir directamente por Grecia o, para quienes prefieren las ciclovías, andar por Duble Almeyda y en Juan Moya conectar hacia Grecia, que a esa altura ya cuenta con una senda para bicicletas. Por ahí, con buen trabajo de muslos, hay que llegar hasta Tobalaba, donde tras unas pocas cuadras de baja se encuentra el Parque Deportivo de Peñalolén.

13. Bustamante - La Reina (Desde Bilbao con Bustamante hasta Parque Intercomunal Padre Hurtado)

Aquí una ruta más larga y exigente, no por lo complicado del camino, que es básicamente recto, sino por su pendiente continua. Son 13 kms de ida, que probablemente no todos puedan recorrer con su respectiva vuelta en 3 horas. Pero es un desafío, que parte en el Parque Bustamante —donde se puede subir directamente por calle Rancagua o tomar las ciclovías de Marín-Pedro León Gallo-Puyehue—, continúa por la ciclovía de Pocuro —que está bastante congestionada a esa hora; una alternativa es ir por Bilbao— hasta arribar, después de una buena recta de subida, al Parque Padre Hurtado.

14. La Florida - Providencia (Desde Paradero 14 Vicuña Mackenna hasta Parque de las Esculturas)

El siguiente es un trayecto largo pero no difícil. Son 17 kms de ida, que se hacen en algo más de una hora, pero por el que se cruza a través de cuatro comunas, partiendo por La Florida, en Vicuña Mackenna, tomando la ciclovía justo en la esquina con Vespucio con dirección al centro. Llegando a Departamental hay que conectar con la ciclovía de Marathon, que nos hace pasar por Macul y Ñuñoa hasta que, al cruzar Grecia, se dobla por Crescente Errázuriz y luego Campo de Deportes, senda que después se transforma en Antonio Varas, calle que nos lleva a Providencia. Cruzando la avenida de ese nombre hay que llegar hasta el Mapocho, donde en un par de cuadras al oriente encontraremos el Parque de las Esculturas, justo en el puente Pedro de Valdivia.

Ruta Norte

15. Vuelta a Quilicura (Desde Líder de Quilicura, pasando por Ruta 5 y Easton Outlet)

Una ruta algo más exigente, que —como todas las demás— se sugiere realizar en compañía. Empieza y termina en el mismo punto, la esquina de O’Higgins con Las Torres, en Quilicura. Sigue por esta última calle hacia el sur-este hasta Lo Cruzat, donde se cambia la dirección hacia el norte para luego doblar al este en Lo Marcoleta hasta la Ruta 5. Ahí se puede circular por la caletera en dirección norte. Llegando al Easton Outlet, en la calle San Ignacio, se toma se toma el paso sobre nivel (se recomienda hacerlo por la vereda, caminando, para mayor seguridad), se cruza la autopista por arriba y se continúa hacia el oeste hasta que la calle se transforma en O’Higgins, por cuya ciclovía se puede regresar al lugar desde donde empezó el viaje. Son 9,5 kms.


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