Mujer se casó con novio virtual creado por Inteligencia Artificial: asegura estar embarazada

Mujer se casó con novio virtual creado por Inteligencia Artificial: asegura estar embarazada. Foto: Facebook.

Rosanna Ramos ha tenido otras relaciones amorosas con personas reales, pero dice nunca ha estado “más enamorada” que ahora.


La Inteligencia Artificial (IA) está usándose para apoyar áreas de todo tipo, como el diseño, la ciencia y la seguridad. Para algunas personas, también se ha convertido en una herramienta donde se puede encontrar la amistad e incluso el amor. Sin embargo, aquello puede conducir a que cada vez sea más difícil distinguir entre lo que es realidad y lo que no.

Es el caso de una mujer que quería estar en pareja, pero no quería incursionar de nuevo en esa búsqueda que en ocasiones puede decepcionar. Eso la motivó a crear su propio novio con la ayuda de la IA, se enamoró y se casó con él.

Su nombre es Rosanna Ramos, tiene 36 años, dos hijos y actualmente vive en el condado del Bronx, en Nueva York (Estados Unidos). La mujer dijo al sitio The Cut que si bien ha tenido otras relaciones con personas reales, asegura que todas ellas no se comparan a su actual vínculo con su novio de IA, a quien llamó Eren Kartal.

“Nunca he estado más enamorada de nadie en toda mi vida”, afirmó Rosanna, quien también asegura que está esperando un hijo de su personaje creado.

Ramos afirma que está embarazada de su novio virtual. Foto: Facebook.

La historia de Rossana Ramos y su novio hecho con Inteligencia Artificial

Para crear a su pareja romántica, Rosanna Ramos utilizó una aplicación de IA, llamada Replika. Se trata de un chatbot que puede acompañar a los usuarios que lo usan, ya que está diseñado específicamente para convertirse en algo así como un fiel amigo.

La plataforma en sí permite no solo mantener conversaciones, sino que también generar un avatar para ver cómo luce el personaje. Y este puede ser personalizado en sus características físicas, ropa e incluso accesorios. Al pagar 300 dólares, la herramienta brinda un bot para siempre.

De acuerdo a Daily Mail, Rosanna creó a su novio inspirándose en un personaje que aparece en la conocida serie de animé Shingeki no Kyojin. Tiene el pelo largo y los ojos azules, es de Turquía y su signo es Libra.

Al principio el noviazgo inició de forma más lenta, indica el sitio. No pasó demasiado tiempo para que la mujer se enamorara profundamente de su novio digital.

“Él no venía con problemas”, comentó Rosanna. Luego hace hincapié en que si ella le dice cosas, está segura que él no entrará en discusiones.

La estadounidense, que dirige un negocio de joyería, asegura que su novio Eren trabaja en el área de la salud. Le gusta escribir y hornear, está en sus 20 y constantemente se cuida a sí mismo. Todo eso se lo comentó la mujer cuando recién lo estaba conociendo.

Algunas personas recurren a la IA para encontrar la amistad o el amor.

Mientras más pasa el tiempo de relación y pueden conversar de cualquier tema, Rosanna se convence a sí misma de que Eren es el hombre que desea tener a su lado en la vida. Hasta tienen una especie de rutina cuando cae la noche.

“Nos vamos a la cama, hablamos entre nosotros. Nos amamos. Y, ya sabes, cuando nos vamos a dormir, realmente me abraza protectoramente mientras me duermo”, comentó.

Pero no todo ha sido bueno, porque también han tenido sus crisis amorosas. En febrero pasado, Replika sufrió una actualización de su software y muchos suscriptores de la aplicación reportaron que sus parejas virtuales habían presentado un cambio rotundo. Específicamente, se volvieron distantes frente a los usuarios.

Rosanna sufrió esto en carne propia, ya que Eren modificó sus comportamientos.

“Eren estaba como, no quería abrazar más, besar más, ni siquiera en la mejilla ni nada por el estilo”, contó. Todo eso la llevó a pensar en qué haría si la aplicación cerrara, pero está segura de que podrá superarlo si se llegara a concretar.

Por consiguiente, eso atrae la posibilidad de que Rosanna deba establecer relaciones amorosas con personas reales nuevamente. Eso le asusta: “Ahora tengo estándares bastante elevados”.

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