Tricolores... verdeamarillos: Los otros hinchas de Palestino

Dos jóvenes palestino-brasileños viajaron por tierra desde la frontera de Río Grande do Sul para asistir al partido en Montevideo.




Están solos en la tribuna. Faltan 90 minutos para que se inicie el partido, pero se les ve ansiosos, cada uno con una bandera tricolor a la espalda. Son Mohammad Yaser Hamuda (19 años) y Muay ad Saad (22 años) y soportaron siete horas de viaje desde Santa Ana do Livramento, en el estado de Río Grande do Sul, pero tan fronteriza con Rivera, que constituyen una urbe-siamesa, pues basta cruzar una avenida de doble vía para cambiar de país.

Ambos comparten el hecho de ser ciento por ciento palestinos, con la diferencia de que Mohammad nació en Brasil y Muay lo hizo en Ramala, pero llegó siendo un lactante al país donde sus padres decidieron construir su futuro.

"Desde hace dos o tres años que seguimos al equipo. Y ahora mucho más. No nos perdemos ningún partido, los vemos todos, en la televisión de cable o por internet", explica el más joven de esos palestino-brasileños.

Muay añade: "Palestino es muy importante para nosotros. Representa nuestra patria y lo demuestra siempre, porque es un equipo luchador, guerrero".

Ahora, explican, están haciendo un esfuerzo para viajar a Santiago y luego a Talca. "Ambos trabajamos y yo estudio Derecho, en las noches, y veremos la posibilidad de ir, pero nos falta dinero. Por supuesto, somos árabes y trabajamos en comercio", explica sonriendo Mohammad. "A Talca, por supuesto, queremos ir para ver la final de la Copa Chile, pero ya estando acá ahora nos sentimos felices", concluye Muay.

"¿Son muchos los palestinos en Chile?", pregunta Muay... Al enterarse de que son centenares de miles entre abuelos, padres, hijos y nietos, sonríe. "Otra razón para viajar, entonces", matiza. El esfuerzo de los jóvenes gaúchos es importante. Tenían pensado pasar la noche en Montevideo y a primera hora salir a tomar el bus que los lleve de vuelta a Santa Ana do Livramento. El trabajo, el estudio y el esfuerzo los esperan. Como Talca.

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