Javier Macaya, jefe de bancada de la UDI: "Los problemas administrativos no pueden nublar la agenda social"

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Según el diputado "si se pagó o no un viático, si se nombró bien o no a una persona, que son temas administrativos, no pueden terminar desviando la atención del gobierno". Y su llamado a La Moneda es "enfocarse en lo social".


El jefe de los diputados de la UDI, Javier Macaya, afirma que la agenda en el Congreso no debe estar concentrada en los temas políticos, sino en los sociales. Por eso, agrega que los errores no forzados del gobierno no deben empañar el sello de la administración de Sebastián Piñera.

Usted fue crítico de la decisión del contralor Jorge Bermúdez por la anulación del proyecto de aborto. ¿Mantiene esos cuestionamientos?

A pesar de que no nos gusta el dictamen del contralor, jamás hablaríamos de una cuarta Cámara o de un nuevo Poder Legislativo como lo hace la Nueva Mayoría cada vez que hay una decisión del Tribunal Constitucional (TC) o de la misma Contraloría que no les gusta. Respetamos la decisión, sin perjuicio de que vayamos a usar todas las herramientas legales para defender la objeción de conciencia, porque está establecido en la ley y en el fallo del TC.

Usted criticó una forma "subjetiva" de informar de la Contraloría. ¿A qué se refiere?

Sí, fue una información subjetiva. Cuando ves la infografía que elabora la Contraloría, uno se da cuenta de que hay un sesgo y una preferencia por una posición en el tema objeción de conciencia. La Contraloría no debe caer en el ámbito de la subjetividad para ningún color político. Segundo, sobre el fondo, me llama la atención que la Contraloría haya generado solo en nueve días un dictamen que trata una materia jurídica tan relevante como la calidad de entes públicos que podrían asumir los prestadores de salud privados por el solo hecho de recibir recursos públicos.

¿Usted ve intencionalidad política de la Contraloría en este caso?

La Contraloría tiene prohibido emitir opiniones políticas y tiene que propiciar que sus dictámenes no den lugar a interpretaciones de uso político. Prefiero pensar que la Contraloría se equivocó, que puede enmendar su error, en vez de que hay intencionalidad política. Lo grave aquí es que si uno extrapola el sentido del dictamen a otras actividades se puede terminar afectando seriamente la manera en que los privados y la sociedad civil participan como receptores de fondo del Estado, ya sea en educación, en los centros del Sename, en los emprendedores que reciben recursos de Corfo. Si a cada uno de ellos, por el hecho de recibir recursos del Estado, se los va a considerar entes públicos, es un grave atentado contra el principio de subsidiariedad y va generando un control sobre la actividad privada ilegítimo. Esto lo debe resolver la Contraloría, porque se excedió en su interpretación de normas jurídicas.

¿Qué medida tomarán como bancada si la objeción de conciencia no se logra extender a instituciones privadas que reciben fondos públicos?

El único camino que quedaría es recurrir nuevamente al Tribunal Constitucional. Yo espero que esto pueda ser resuelto de otra manera.

Desde el año pasado que su sector ha insistido con la objeción de conciencia, pero hoy son gobierno y esta es una ley aprobada con un 70% de apoyo ciudadano. ¿Existe temor de que el Ejecutivo pueda mostrar falta de sintonía con la ciudadanía?

La ley de aborto en tres causales, aunque a muchos no nos haya gustado, fue aprobada y nadie está planteando derogarla. Nosotros tenemos un problema con dos derechos que, a nuestro juicio, no se contraponen. Primero: el derecho de las entidades privadas y las personas naturales y jurídicas de ser objetores de conciencia. Segundo: el derecho de miles de personas vulnerables de atenderse en clínicas privadas que puedan ser objetoras de conciencia.

En relación al proyecto de ley contra nepotismo, usted dijo: "No bailaremos nunca al ritmo de la izquierda. Si RN y Evópoli quieren seguir el juego de la oposición, es respetable". ¿Cree que legislar sobre nepotismo es una idea de la izquierda?

Según lo que hemos hablado al interior de la bancada, nos gusta hablar de meritocracia y no de nepotismo o contratación de parientes. En ese sentido, propusimos un proyecto en 2016 y Michelle Bachelet y todos los que hoy están rasgando vestiduras sobre este tema no le pusieron urgencia, porque no era tema. Así, dijimos: hoy la agenda social es la que tiene que marcar la pauta. Ahora, no descartamos que uno pueda legislar sobre los temas que son más importantes, que son los sociales, y accesoriamente se puede conversar acerca de otros temas. Se puede caminar y mascar chicle al mismo tiempo, pero siempre es más importante caminar.

Jaime Bellolio dijo que legislar en contra del nepotismo es una idea de derecha pues se trata de méritos.

Sí, pero este tema lo puso la izquierda en la agenda para perjudicar a Sebastián Piñera. Si nuestro sector quiere marcar agenda, digo marquemos con nuestros temas, como inmigración, infancia, seguridad ciudadana. Si la izquierda quiere hablar de otros temas, no nos negamos, pero no pueden ser los ejes principales de la gestión. Si finalmente llegamos a legislar al respecto, vamos a poner el eje en la meritocracia. No tenemos que andar dando pruebas de blancura en un tema que ya ha sido motivo de intención legislativa por la UDI desde 2016.

¿Está disponible para que se fusionen los proyectos de su coalición para legislar al respecto?

Creo que es más importante caminar a paso firme en los temas de la agenda social, pero estamos abiertos a la idea de fusionar los proyectos, aunque con una convicción: no es bueno legislar sobre caliente ni hechos contingentes, ni menos en estos temas que no son sociales, sino que de la agenda política.

¿Cómo se posicionará la bancada de la UDI durante este periodo en el Congreso?

El llamado que hizo el Presidente Piñera a los grandes acuerdos es algo que tenemos que cuidar y tenemos que recuperar la urgencia en los temas sociales que son más relevantes para el Presidente como la agenda de niñez, de inmigración, delincuencia, de salud, son temas que no pueden ser nublados por temas administrativos. Todo esto que tiene que ver con que si se pagó o no un viático, si se nombró bien o no a una persona, que son temas administrativos, no pueden terminar desviando la atención del gobierno. La UDI va a trabajar para que la agenda social más importante siga su curso.

¿Cree que el gobierno ha logrado imponer su agenda en el Congreso? Se ha visto fuertemente temas como aborto, nepotismo e identidad de género, que no son de La Moneda.

El gobierno ha acertado en tener temas más sociales, de preocupación de la gente como salud, remedios, migración, niñez y seguridad, y tener menos temas políticos. Pero lamentablemente los problemas administrativos quizás han nublado la agenda social del gobierno y eso no puede ocurrir, por eso es clave que el gobierno se enfoque en lo social. Cuando hay un problema administrativo, hay que tomar decisiones, no estirar los problemas, tenemos que ser capaces de superarlo rápido. Los problemas administrativos no pueden nublar la agenda social. Al gobierno lo eligieron para que Chile vuelva a crecer y genere empleo, por eso debe resolver los problemas administrativos de forma más rápida. Yo no tengo duda de que eso se va a imponer en el éxito y proyección de este gobierno.

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