De incógnita a figura: el momento más feliz de Marco Rojas, el Kiwi que conquistó a Colo Colo

Marco Rojas, corriendo a la banca para abrazarse con sus compañeros tras anotarle a O'Higgins. Foto: AGENCIAUNO.

El neozelandés se ha ido adaptando cada vez mejor al esquema de Gustavo Quinteros, lo que le ha permitido sumar minutos y tener actuaciones clave. Asimismo, dentro del plantel es muy querido por todos.



Marco Rojas vive el momento más feliz desde que juega en Colo Colo. El jugador neozelandés e hijo de padre chileno cumple el sueño familiar de defender al club de sus amores. Conocido como el Messi Kiwi, frente a O’Higgins fue la figura del partido asistiendo a Gabriel Costa y anotando el segundo gol del partido y el primero desde que está en Chile. Además, sus números fueron redondos, ya que completó un 81% de los pases efectuados, ganó la mitad de sus duelos en el suelo y también entregó dos pases clave.

Sus actuaciones son seguidas con gran atención en su país y ha sido la propia selección nacional la que ha ido compartiendo en sus redes sociales sus actuaciones. No fue la excepción el domingo, cuando le convirtió al cuadro de Rancagua. “Vaya gol de Marco Rojas para Colo Colo”, escribió la cuenta oficial de los All Whites en Twitter.

“Rojas tiene ascendencia chilena, creció apoyando a Colo Colo, y fue figura instrumental en la victoria, preparando el primer gol y anotando el segundo”, destacó por su parte el medio local Stuff, que ha estado pendiente de cada una de las participaciones del oceánico en el cuadro albo, donde fue titular precisamente en el partido ante Coquimbo, donde bajó la estrella 33.

Más extremo

En el plantel es bastante querido por sus compañeros, que lo consideran un tipo bastante educado y muy amable. A pesar de que todavía tiene problemas con el idioma, se las ha arreglado para hacerse entender cada vez mejor. En la cancha, Gustavo Quinteros le ha visto más potencial como extremo que como 10, y eso ha hecho también que poco a poco vaya ganando minutos, dejando atrás las primeras semanas de adaptación física. “La posición no importa tanto, con tal de jugar”, ha señalado el nacido en Hamilton hace casi 31 años.

“Ha sido una experiencia tremenda para mí. Me ha costado un poquito acostumbrarme a todo lo que viene de vivir en Chile y a lo que es estar en Colo Colo, pero me han tratado súper bien mis compañeros y todos los del club desde el primer día. Lo he pasado bien, he aprendido mucho del fútbol chileno y cómo es el jugador de este club. Me he llevado bien estos meses y tengo el contrato para el próximo año y estoy pensando en cumplirlo”, señaló hace un par de semanas.

Estos meses en el país le han ayudado a hacerse una idea más clara de la liga chilena. Sin embargo, todavía no tiene muy claras las diferencias con el fútbol australiano. “Estuve pensando en eso y todavía no tengo una respuesta clara. Es más que nada el ambiente, la pasión por el fútbol. La atención de la prensa, las redes sociales. En la cancha no llevo ni la mitad del campeonato y no he tenido la chance de jugar con todos los equipos”, se excusó en esa misma oportunidad.

En el país también ha estado acompañado por sus familiares chilenos. Algunos de ellos viven en Quillota y otros incluso lo estuvieron acompañando en el encuentro ante O’Higgins. Precisamente, esa fue una de las razones por las que decidió cruzar el mundo. “Es algo que me saca de mi zona de confort y, además, es una oportunidad increíble de pasar un tiempo en el país de mi padre, en el país de mi familia, donde crecieron y nacieron. Es parte de mi cultura y de mi identidad en cierto sentido también, por lo que fue todo eso junto lo que hizo de este un movimiento algo realmente atractivo y emocionante”, reveló.

Sigue en El Deportivo

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.