Holanda hunde a un destrozado Brasil y se queda con el tercer lugar

La escuadra de Van Gaal resolvió el partido en apenas 17' minutos y aumentó la crísis futbolística del "scratch". La desesperación y el poco juego brasileño fueron la tónica del encuentro.




Fue un pésimo Mundial para Brasil. Los locales no encontraron su juego a lo largo del campeonato, el cual culminaron con una dura derrota ante Holanda. Con goles de Van Persie a los 2', Blind a los 17' y Wijnaldum a los 91', el equipo europeo se quedó con el tercer lugar de la Copa del Mundo tras vencer al local por 3-0.

Al minuto de juego Thiago Silva derribó a Robben en el borde del área y el juez Djamel Haimoudi cobró falta penal. Robin Van Persie puso rápidamente en ventaja a los tulipanes al derrotar sin problemas a Julio César desde los doce pasos.

Brasil se desesperó de inmediato y con poco juego buscaban el gol. A los 17' Daley Blind aprovechó un grueso error en la zaga del "scratch" y puso el 2-0 con un furioso remate.

De ahí en adelante, Holanda apostó al contragolpe mientras los locales buscaban descontar a toda costa. Recién a los 38' los sudamericanos tuvieron la primera clara con un tiro libre de Oscar que ni Paulinho ni David Luiz lograron conectar en la boca del arco.

En la segunda mitad, la tónica del partido se mantuvo con un Brasil impreciso y con Holanda controlando el peligro en su arco con tranquilidad. A los 50' Robben eludió rivales, sacó un remate que rebotó y que casi termina en el tercero holandés tras cabezazo de Wijnaldum.

Diez minutos más tarde, Ramires se metió en el área europea y sacó un disparo en inmejorable posición, pero la pelota se fue apenas ancha. El resto del encuentro fue monótono, con muchas infracciones y sin ocasiones claras para ninguno de los dos equipos.

La lápida final llegó a los 91' minutos con el golazo de Wijnaldum tras centro de Van Persie. Un minuto más tarde, Van Gaal envió a la cancha al portero Vrom, lo que significó que los 23 jugadores holandeses tuvieran minutos en esta Copa del Mundo.

De esta manera, Brasil coronó un pésimo Mundial en casa con un cuarto lugar y siendo derrotado inapelablemente en sus últimos dos partidos. Probablemente, el proceso de Luiz Felipe Scolari llegó a su fin.

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