Debate por días de vacaciones en el país

El mercado laboral enfrenta uno de los peores escenarios en las últimas cuatro décadas. Las pérdidas de puestos de trabajo que ha dejado la crisis social y luego la pandemia son tan preocupantes que ni una eventual recuperación económica será capaz de revertir la situación por completo.

En este contexto -y a días de haber comenzado el periodo estival-, se han levantado algunas voces pidiendo evaluar la cantidad de vacaciones que tenemos en Chile. Un informe de la OCDE de enero de este año revela que Chile tiene, junto a Corea, una de las menores cantidades (15) de días hábiles de vacaciones anuales obligatorias, salvo por Estados Unidos (0), México (6), Japón y Canadá (10) y Turquía (12). La mayoría de los países europeos tiene entre 20 o más días de vacaciones, con Luxemburgo (26) encabezando el listado. Visto en este contexto, pareciera que nuestro país tiene una brecha por cerrar en relación a varios países desarrollados.

Sin embargo, la realidad que enfrenta la creación de puestos de trabajo en el país no puede desacoplarse de estas discusiones que a primera vista parecen tangenciales, pero que tienen implicancias directas en los costos asociados al empleo. Sus adherentes suelen enfatizar los beneficios que genera en los trabajadores mayores días de descanso obligatorio, destacando los efectos en salud mental, productividad y conciliación con la vida familiar.

Pero no es posible mirar los días asociados a las vacaciones anuales de manera aislada. Porque, por ejemplo, Chile es uno de los que encabeza la lista de feriados junto a Corea y República Eslovaca (15) según el mismo informe de la OCDE citado, superado solo por Japón (19). Todos los países europeos con mayor cantidad de días de vacaciones tienen entre 10 y 11 feriados.

El efecto económico de los feriados tiene una incidencia mucho mayor en la actividad que los días de vacaciones, porque los primeros paralizan sectores completos, sobre todo si, como en Chile, caen en la categoría de irrenunciables. Entonces la reducción de la cantidad feriados es la verdadera discusión que debe tener lugar en nuestro país, sin perjuicio de que es válido evaluar la extensión de las actuales vacaciones en el país, donde habrán de considerase no solo la cantidad de días nominales de descanso, sino también variables de productividad. Cabe no perder de vista que países con más días de vacaciones que Chile a su vez son más productivos, lo que brinda mayor justificación a descansos más prolongados.

Desde el punto de vista de aspirar a una mayor eficiencia y racionalidad en la forma de distribuir los días de descanso, parece razonable que se abra un debate en el país para efectos de disminuir los feriados y aumentar los días de vacaciones. Ello sería mucho más eficiente para las empresas, pero también para el funcionamiento general del país, conciliando a su vez los legítimos intereses de los trabajadores.