A casa: Onana, arquero de Camerún, se despide del Mundial por discrepancias con el técnico

André Onana, en el partido ante Suiza (Foto: Reuters)

El portero del Inter de Milán estaba llamado a convertirse en una garantía para los Leones Indomables. Sin embargo, no compartía el planteamiento del estratega Rigobert Song, quien no lo volverá a considerar.



André Onana estaba llamado a convertirse en uno de los mejores arqueros del Mundial. Por rendimiento y por antecedentes, era quien tenía que darle garantías a Camerún de que el pórtico estaría bien cubierto. Alcanzó a hacerlo en el debut frente a Suiza, pero ni siquiera fue incluido en el banco ante Serbia. Su suerte está echada: no volverá a actuar en Qatar y tendrá que volver a casa.

El guardameta es uno de aquellos que cumplen con el perfil del portero actual. Formado en las divisiones inferiores del Barcelona y transferido al Ajax, agregó a su estilo características de dos escuelas que privilegian a los porteros que, además de atajar, son capaces de darle un buen trato al balón con los pies y que son capaces de participar en la elaboración del juego desde la primera fracción del campo. Onana suele jugar adelantado y arriesgar en sus intervenciones. Al técnico Rigobert Song la idea no le causaba mucha gracia.

Ese es, de hecho, el origen de la disputa entre ambos. Song le exigió que fue más directo y que despejara el balón evitando cualquier peligro. Al golero no le gustó la indicación. Había en su rebelión un concepto más de fondo: que siente el fútbol de otra manera, considerando la influencia de las escuelas que lo fueron moldeando. Ni la intervención de Samuel Eto’o, presidente de la federación camerunesa, calmó las aguas.

Onana, en la ceremonia de los himnos, antes del partido entre Camerún y Suiza (Foto: Reuters)

Song, firme

Después del partido frente a Serbia, del técnico Song fue categórico. “La posición del portero es muy importante. Estamos en un torneo difícil y sé qué es lo que tengo que hacer, que es asegurarme que el equipo está por encima de las individualidades. Onana quiso salir y lo aceptamos. Hay 26 jugadores en este equipo trabajando por esta competición juntos y queremos mostrar ese espíritu de disciplina y respeto. Estamos aquí para demostrarlo. Es un gran portero, pero nos enfocamos en el equipo”, planteó, poniéndole la lápida al guardameta.

Ante Suiza, Onana había participado del juego actuando, principalmente, fuera del área. La demarcación es familiar para el estratega, pues fue un defensor destacado quien llegó a actuar en el Liverpool.

Quiero mostrar ese espíritu de disciplina y respeto, pero tienes que adaptarte a la disciplina del equipo. Si tú no puedes hacerlo, si no puedes adecuarte a lo que le pedimos a este equipo, creo que es necesario dar un paso al lado y tomar responsabilidades”, enfatizó el técnico, en una fuerte señal de autoridad.

Frente a Serbia, la apuesta dio un resultado relativo. Camerún salvó un punto, pero recibió tres goles. Habrá que ver qué resulta en el duelo ante Brasil, mucho más potente que ambas escuadras europeas en materia ofensiva. ““Vimos a nuestros jugadores reaccionar muy bien y les felicito por ello. Lo que aprendemos de este partido es que tenemos capacidad de reacción. Tenemos un equipo que se sobrepone a las adversidades y eso es muy importante; nos da una nueva dimensión para el próximo partido”, declaró Song después de la igualdad ante los balcánicos.

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