De concretarse el encuentro, el viaje del presidente Moon Jae-in a Pyongyang sería el primero de un jefe de estado surcoreano en más de diez años.
AFP
13 ago 2018 08:00 AM
De concretarse el encuentro, el viaje del presidente Moon Jae-in a Pyongyang sería el primero de un jefe de estado surcoreano en más de diez años.
"Está claro que nuestros socios de la Asociación de Naciones del Sureste Asiático saben cuán importante es la desnuclearización de Corea del Norte para su propia seguridad", añadió.
Delegaciones de la Cruz Roja de ambos países tenían previsto iniciar una reunión, en un hotel del célebre monte Kumgang, en la costa suroriental norcoreana.
Moon Jae-in intervino en la Cámara de Diputados en su visita en Rusia en la que señaló que la reunión entre Donald Trump y Kim Jong Un puso fin a las relaciones hostiles.
El viaje del líder norcoreano a Beijing, el tercero desde marzo, no fue anunciado de antemano. Kim buscaría apoyo para aliviar sanciones.
Fin de las maniobras ocurre días después de la cumbre entre Donald Trump y el líder norcoreano, Kim Jong Un.
El mandatario norteamericano llegó a bordo de un Air Force One que tocó tierra en Paya Lebar a las 20:20 horas (08.20 horas de Chile), luego de un vuelo desde La Malbaie (Canadá) tras asistir a a la cumbre del G7.
Moon Jae-in y Kim Jong Un se reunieron nuevamente ayer. "Todo avanza adecuadamente", dijo Trump sobre su cita con el líder de Corea del Norte.
Trump dijo el viernes que Washington estaba teniendo "conversaciones muy productivas" con Pyongyang para reinstalar la reunión del 12 de junio, solo un día después de cancelar el encuentro citando la hostilidad de Corea del Norte.
Un portavoz de la oficina presidencial surcoreana explicó que se está trabajando para tratar "de averiguar el verdadero significado del mensaje enviado por Corea del Norte".
La sorpresiva reacción del líder norcoreano se debe a los ejercicios militares que realizan EE.UU. y Corea del Sur, los que considera una "provocación".
Además el gobierno del país asiático decidió suspender las charlas programadas para el 16 de mayo en Panmunjom.
La distensión que vive la península luego de la cita de Kim con Moon ha reactivado proyectos de infraestructura de Corea del Sur, China y Rusia en la frontera con Norcorea.
El proceso implica derrumbar túneles, bloquear "por completo" las entradas y eliminar las instalaciones de observación, centros de investigación y estructuras de unidades de guardia.
Ejercicios, que durarán dos semanas, tienen lugar a un mes de la cumbre entre Estados Unidos y Corea del Norte.