Juego limpio: Revive los grandes "fair play" que el mundo del fútbol ha dado

El notable gesto visto en Arabia Saudita recuerda otros casos ocurridos en Rumania, Irán e Italia. En Sudamérica, se cuenta la actitud de Mathias "El Honesto" Riquero. <b>Recuérdalos.</b>




Muchas veces criticado, a veces manoseado y pocas veces ocupado, el "fair play" es considerado en el fútbol una actitud "noble y honesta", especialmente en aquellos momentos conflictivos durante los compromisos.

Sin embargo, en el último tiempo son contados los casos donde el "juego limpio" ha funcionado y se ha destacado por sobre las malas actitudes, como ocurrió este último fin de semana en Arabia Saudita, en el video que encabeza la nota.

Por eso, en La Tercera hemos hecho un repaso por aquellos partidos que han tenido este agregado honesto, recordando lo ocurrido en duelos en Irán, Noruega, Rumania, Italia y Uruguay, este último caso protagonizado por el ahora volante de Ñublense Mathías Riquero.

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1.- Miroslav Klose - Lazio

El delantero alemán fue protagonista de un notable gesto de "fair play". Jugando por la Lazio, el goleador anotaría con la mano a los cuatro minutos el que era el 1-0 para los capitalinos sobre Napoli, en duelo válido por la quinta fecha de la temporada 2012-2013.

Pese a que sus propios compañeros lo abrazaron, lo que vino a continuación es digno de destacar. Klose se acercaría al árbitro y le explicaría la forma en la cual marcó el tanto, situación que provocó la anulación del gol y las felicitaciones de todos en la cancha, y en el estadio, al alemán.

2.- Morten Weighorst - Dinamarca

En 2003, y en medio de un amistoso entre Dinamarca e Irán jugado en Hong Kong, los jugadores iraníes escucharon un pitazo -que terminaría siendo de un silbato en las galerías- que hizo que uno de ellos tomara el balón con la mano creyendo que había llegado el entretiempo. El árbitro, que no había señalado acción alguna, cobró un increíble penal, ante lo cual el técnico de Dinamarca, Mortel Olsen, pidió a uno de sus jugadores que desviara su disparo, siendo Mortel Weighorst el elegido para rematar muy lejos del arquero en señal de "fair play".

3.- Costin Lazar - Rapid Bucarest

A veces los jugadores exageran sus caídas dentro del área para que el árbitro cobre falta penal. Sin embargo, en esta ocasión Costin Lazar del Rapid Bucarest simplemente perdió el equilibrio ante el quite de balón de un rival, ante lo cual el juez cobró la pena máxima de forma increíble. Lo que vino después fue más notable: Lazar rechazaría cobrar el tiro y pediría al referí saque de fondo para el equipo rival. Insólito.

4.- Björn Bergmann Sigurdarson - Lillestrom

Este caso se cuenta entre lo más increíble cuando se habla del "fair play". Ocurrió en un partido de la Liga Noruega en mayo de 2012 entre Brann y Lillestrom, en un duelo que los tenía peleando por no descender de la Premiership.

En el segundo tiempo, y cuando ganaban por 3-2 el Brann, un jugador del Lillestrom quedó lesionado cuando su equipo atacaba. Ante aquello, Erik Mjelde del Brann le devolvió el balón al portero, pero de manera increíble lanzó fuerte el balón y anotó un increíble gol que el portero Stefan Magnusson no pudo contener.

Con el 4-2 para el Brann, y tras el insólito gol, los jugadores de dicho conjunto decidieron dejar que el Lillestrom anotara un tanto "compensatorio". Pese a que el portero del Brann "opuso" resistencia, finalmente, fue Sigurdarson el que marcaría el descuento y el definitivo 4-3.

El caso de Mathías Riquero

En Sudamérica también hay casos de "fair play", siendo uno de ellos el que protagonizará Mathías Riquero, hoy en Ñublense, cuando jugaba por el Liverpool de Uruguay.

En 2009, un disparo suyo se introdujo por el costado del arco provocando la confusión del juez del partido entre su equipo y el Central Español. Y es acá donde aparece el ahora volante de Ñublense, quien luego de no reclamar por la invalidación definitiva del gol, en un partido que perdería finalmente su equipo y que los alejaría del primer lugar, afirmó que "me alegró que el árbitro no lo validara. Por él y por los jugadores de Central (...) Pero no fue gol, esa es la verdad. La pelota entró por un hueco. Menos mal que no lo cobró, hubiese sido feo para todos".

Esta actitud de Fair Play, por cierto, le valió el apodo de "Honesto" y lo dejó como un jugador respetable dentro del fútbol uruguayo.

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