Protocolo del Zoológico de Santiago no considera "invasión de jaulas"

La muerte de los leones "Manolo" y "Flaquita", en el Zoológico Nacional, como consecuencia de la acción del joven de veinte años, Franco Ferrada, quien ingresó a la jaula de los felinos, a causa de lo que han denominado "delirio mesiánico", fue una situación inédita en el recinto del cerro San Cristóbal. Pero la conmoción en la opinión pública y redes sociales cuestionando el hecho llegó incluso a Hollywood, donde actrices como Kaley Cuoco criticaron el sacrificio de los animales.

"Es la primera vez en 90 años", explica la directora del Zoológico Nacional, Alejandra Montalva, respecto de lo ocurrido. "Es un hecho lamentable, pero ningún protocolo se pone en estos casos tan extremos", asegura.

Y este es el motivo por el cual el Plan de Emergencia Integral del recinto no incluye una instrucción específica para los casos en que un visitante irrumpa en las jaulas.

Para salvar la vida de Franco, entonces, se utilizó el procedimiento denominado "Clave Roja", que según establece el manual del recinto, debe aplicarse "cuando se produzca el escape de todo animal que pueda causar daño físico evidente y/o la muerte".

Además, el documento señala que debe existir un tirador autónomo que "en caso de amenaza, con riesgo de muerte para alguna persona, disparará para eliminar al animal".

Según Montalva, estas medidas de seguridad y emergencia han sido autorizadas por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) y las precauciones que se toman "exceden incluso estas normas".

CONTENCION
Asimismo, la encargada de Manejo y Bienestar Animal del recinto, Andrea Caiozzi, explica que "como equipo técnico, habíamos llegado a un acuerdo el año antes pasado, indicando que el protocolo de escape de animales se ocuparía también frente al ingreso de una persona a un recinto.  Si uno lee el protocolo con cierta lógica, éste indica que si hay riesgo de vida humana se debe abatir a un animal o proceder a la contención química cuando no hay riesgo".

El protocolo del Zoológico Nacional establece, además, instrucciones para actuar en casos de incendio, accidentes de trabajo o visitantes, sismos, asaltos, amenaza de bomba o atentado animalista.

Desde el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG), indicaron que "el protocolo se ajusta a la normativa vigente y a la materia fiscalizada en el plan anual por parte del servicio. Los protocolos no consideran situaciones excepcionales de manera puntual, que se escapan del comportamiento habitual de los visitantes a dichas instalaciones".