Andrés Valdivia: amor de hombre

AndresValdivia

En este cuestionario de amor y sexo, el músico y fundador de Noise Media y Zeppelin de 42 años confiesa que la monogamia es un imperativo financiero-práctico posible, asegura que el porno es un acto libertario que debiese estar 'protegido constitucionalmente' y reconoce que, aunque se pasó la vida creyendo que el engaño sexual era la traición total, el engaño amoroso "duele más".




Cuestionario: Constanza Michelson / Fotografía: gentileza Andrés Valdivia / Ilustración: Paloma Moreno

Paula.cl

¿A qué mujer no se puede dejar nunca en la vida: la madre, la compañera fiel o la fatal?

A las mujeres no se les deja. Se les pone pausa, con suerte.

¿Cómo se supera una rotura de corazón?

Renovando el compromiso con uno mismo: trabajando, creando y zambulléndose en la auto indulgencia libertina de la soledad.

¿Se puede desear sin amar?

Era que no, por supuesto.

¿Y amar sin desear?

Me imagino que sí, pero no he tenido la suerte.

¿Se reconcilia del todo un hombre con su pene?

Un viejo sabio me dijo una vez que a los 40 uno dejaba de ser esclavo de su miembro y que allí se abría una nueva etapa de la vida, de libertad y reconciliación. Tengo 42 y no he tenido la suerte aún.

Porno: ¿método de relajo, anestesia de frustraciones, complemento sexual o placer solitario irreductible?

Acto libertario de autoafirmación irremplazable y que, creo, debería estar protegido constitucionalmente.

¿Conviene realizar las fantasías sexuales?

Conviene, siempre y cuando cada fantasía cumplida pase a ser parte del canon y el vacío impulse a encontrar nuevas fantasías de reemplazo. El sexo es avanzar y repetir, conquistar nuevos territorios y seguir buscando.

Erotismo supremo: ¿Hacerle lo que quieras o que te hagan lo que quieran?

Soy un hacedor impenitente, pero guardo la esperanza de que esto se revierta alguna vez en la vida.

¿Lo que más se agradece del amor?

Esa sensación expansiva de que todo es posible y perfecto.

¿Y del sexo?

Esa sensación- siempre efímera- del triunfo total y definitivo.

Decir para dejar a alguien: ¿"ya no te amo" o "no eres tú soy yo"?

Ambas pueden ser mentira al momento de decir adiós, pero a veces no queda otra que irse nomás.

Monogamia, ¿posible o un delirio?

Perfectamente posible como proyecto y un imperativo financiero-práctico en estos días; lo que no implica que no sea pega.

¿Es mejor ser el marido o el amante?

¿Rafa Araneda o Don Draper? Esa no es una pregunta.

La peor traición: ¿el engaño sexual o el engaño amoroso?

Me pasé la vida pensando que el engaño sexual era la traición total, pero los años me han ido enseñando que es la otra la que duele más.

¿Cómo sigue una relación estable cuando la libido baja?

Con intimidad, me imagino. A veces pienso que el sexo es eso: un largo proceso de construcción de intimidad y generación de caja para los tiempos de vacas flacas.

Falta imperdonable: ¿la desconexión intelectual o el corto circuito sexual?

La desconexión intelectual puede sublimarse con buenos amigos, libros, películas y canciones. El corto circuito sexual solo produce distancia y es difícil de ignorar.

¿Por qué las mujeres andan diciendo que no hay más hombres?

Porque de alguna manera retorcida, ellas así lo prefieren.

¿Qué crees que buscan las mujeres en un hombre?

Podría teorizar y hacerme el lindo, pero luego veo Instagram para el día del padre y cacho que mejor cerrar la boca y asomarse al abismo nomás.

¿Se te repite el mismo tipo de mujer/hombre en tu elección de pareja?

Uno le hace el quite, uno se hace el huevón, pero hay ciertas vetas estructurales que no cambian, y se repiten con variaciones marginales que, por suerte, hacen toda la diferencia.

Fetichismo: ¿delanteras o retaguardas?

No hay vida sin potos. Las pechugas tienen su encanto y la varianza es tal que se podría hacer un estudio al respecto, pero el poto es el poto y en él pueden encontrarse las respuestas al misterio del universo.

¿Familia, un pololeo eterno o mansión playboy?

La familia Playboy, qué duda cabe. ¿El pololeo? El peor invento de la humanidad.

Tras el feminismo, ¿es más fácil o difícil el amor y el sexo hoy?

Ni idea. No sé cómo era amar ni revolcarse en los años 50. Me imagino eso sí que debe haber sido más fácil, pero más fome, ambas cosas.

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