Fue otro show memorable y sin inconvenientes. “El Sol” nuevamente apareció de noche.
El pasado martes 22, Luis Miguel ofreció su segundo espectáculo en el Movistar Arena, de un total de diez que tiene pactados en el lugar hasta los primeros días de septiembre. Aunque la noche estaba fría y lluviosa, con un invierno que golpeaba torrencial la ciudad, el intérprete se pudo sobreponer sin mayores inconvenientes y desplegó un concierto que como es habitual partió con la clásica Será que no me amas. Profesionalismo a prueba de dudas.
Todo secundado por una impecable banda de músicos, integrada por tres coristas, cinco vientos, dos tecladistas, guitarrista, bajista, percusionista y baterista.
En el inicio y sobre la parte de atrás, la imponente pantalla gigante que cubre el Movistar Arena -de 15 x 15 metros, de mayores dimensiones a las habituales en los shows del lugar y de definición espectacular- amplifica secuencias de toda su trayectoria, desde el joven de mirada desafiante de los 80 hasta el fenómeno que aún golpea sin merma en su adultez, ya a los 53 años.
Después pasaron hits como Suave, Culpable o no o Te necesito, un set de boleros, un set de mariachis, y los tempranos himnos Ahora te puedes marchar, La chica del bikini azul, Isabel y Cuando calienta el sol. La ovación del público fue inmediata.
Esta noche, el astro mexicano materializará su tercera fecha en la capital.
“Luismi” tiene fechas para el 23, 25, 26, 28, 29 de agosto y el 4, 5 y 6 de septiembre. Los boletos se agotaron en 13 horas.