El que la Contraloría haya determinado que el ministro de la Segpres no observó la prescindencia en el ejercicio de sus funciones es un hecho de particular gravedad, que La Moneda no puede eludir.
Opinión
Editorial
Si bien es necesario hacerse cargo de la pérdida de legitimidad de la norma producto de casos de corrupción, esto debe hacerse mediante los cauces constitucionales y no por medio de artilugios.