Por Álvaro Peralta Sáinz, cronista gastronómico

¿Cómo a nadie se le ocurrió antes abrir un tenedor libre de comida peruana? Bueno, como sea, ahora ya hay varios en Santiago y -se dice- este de Bilbao con Román Díaz fue el primero. Además, tiene el mérito de haber aguantado los tiempos de pandemia y sus restricciones. Más allá de todo eso, llegamos ahí un jueves alrededor de la una de la tarde y ya había bastante gente. Más tarde, el local -muy amplio y con dos comedores- se repletaría.

Instalados en una mesa cercana a la puerta para aprovechar de que nos llegara algo de aire (hacía calor adentro), ordenamos un pisco sour ($4.900) que estaba un poco dulce pero con buena potencia, más una Royal Guard ($3.900). Luego, nos dirigimos hacia un extremo del gran mesón de comida y comenzamos a ver nuestras opciones. Todo partía por algunas ensaladas varias, las que no probamos al igual que un buen número de otros comensales. De hecho, esa sección se mantuvo casi intacta durante todo nuestro almuerzo.

Luego pasamos a los platos fríos y optamos por un ceviche mixto, simple pero cumplidor, más un tiradito al cilantro que -aunque cortado un poco grueso- estaba muy sabroso. En ambos platos, el pescado utilizado era reineta. Probamos también un tiradito picante que no picaba y un pulpo al oliva cortado un poco grueso pero que andaba bien. Las causas simplemente olvidables aunque mucho mejor unas paltas rellenas con una especie de ensalada rusa: frescas y sabrosas.

De ahí pasamos a los platos calientes. Lomo saltado impecable. El ají de gallina no picaba pero aún así estaba rico. Los chicharrones de chancho, algo secos pero sabrosos. El chanchito asado con salsa de maracuyá, lo mejor del almuerzo. ¿Y el chaufa? Cumplía, pero no era para volverse loco. Había más preparaciones en clave peruana, además de algunos colados como empanadas de jamón y queso y rolls de kanikama. Se extrañó algún anticucho de corazón. Se pidió también una Cusqueña ($3.900) y probamos un suspiro limeño y una torta tres leches que solo cumplían.

Hay que reconocer que no es la mejor comida peruana que hemos comido en la vida, aunque el almuerzo tuvo sus puntos sabrosos. Además, al ver a tanta gente -de todas la edades- tan felices saboreando tantos y distintos platos lo cierto es que no se puede desconocer que aquí la cosa está funcionando. Es decir, comida aceptable a buen precio y en cantidades ideales para “darse la pala” con amigos o familia. Desconocer eso sería simplemente estar desconectado de la gente, o la calle, como quieran decirle. Algo no poco común, lamentablemente, en nuestro oficio.

CONSUMO TOTAL: $46.500 (Lunes a jueves $16.900 por persona y niños $8.900. Viernes sábado y domingo $22.900 y $10.900 respectivamente. Bebestibles aparte).

DIRECCIÓN: Francisco Bilbao 1042, teléfono 222094156, Providencia.

HORARIO: Lunes a sábado 12:30 a medianoche. Domingo 12:30 a 23 hrs.

ESTACIONAMIENTO: Tiene (gratuito).

PÚBLICO: Todo público.

EVALUACIÓN: ✮✮✮

Calificaciones: ✮✮✮✮✮ Sobresaliente / ✮✮✮✮ Excelente / ✮✮✮ Satisfactorio / ✮✮ Mucho que mejorar / ✮ Para no volver