Arqueólogos alemanes y kurdos llegaron a las ruinas del palacio del imperio Mittani, de unos 3.400 años de antigüedad, en el Kurdistán iraquí.

Según los científicos "las paredes de la construcción son gruesas, de hasta dos metros de ancho, y están fabricadas con ladrillos de barro". En las ruinas, que se encuentran a una altura de siete metros, los expertos hallaron varias habitaciones, incluso algunas de ellas revestidas con yeso.

Se hallaron también restos de murales pintados de color rojo y azul brillante, además de 10 tablillas de arcilla con escrituras que están siendo traducidas. Una de ellas, al parecer, da a entender que la ciudad existió durante al menos 400 años.

"El imperio Mittani es uno de los menos investigados del antiguo Oriente Cercano", sostiene Ivana Puljiz, una de las investigadoras, hasta el punto de que se desconoce incluso cuál fue su capital, por lo que el descubrimiento de este palacio es sumamente importante para la arqueología.

Se sabe que el imperio se desarrolló desde el siglo XV hasta la mitad del siglo XIV a.C., extendiéndose desde la costa oriental del Mediterráneo hasta la región donde ahora se encuentra Irak.