Sebastián Vettel se va de Ferrari sin haber entregado ningún título al equipo de la Scuderia, que busca desesperadamente volver a saborear la alegría de un campeonato. El alemán, tetracampeón del mundo con Red Bull, se va por mutuo consentimiento y en medio de la incertidumbre de la pandemia del coronavirus que ha pospuesto o cancelado las 10 primeras fechas del campeonato 2020.

El piloto de 32 años se unió a Ferrari en 2015 para reemplazar a Fernando Alonso, pero fue incapaz de repetir los éxitos conseguidos en el equipo austriaco en las temporadas 2010, 2011, 2012 y 2013. Una vez que Vettel se convirtió en el Nº 1 en Ferrari, los expertos consideraban que era candidato a romper la marca de siete títulos de Michael Schumacher, una tarea en la que hoy Lewis Hamilton (Mercedes-AMG) corre solo, con seis coronas.

Inevitablemente, el crecimiento de Hamilton en el equipo alemán ha sido siempre puesto como un espejo de la situación de Vettel en Ferrari, sobre todo por parte de los fanáticos y especialistas italianos, conocidos por su exigencia a quienes representan a la escudería más ganadora de la historia. De las 53 carreras ganadas por Vettel, 14 vinieron con Ferrari, incluyenda una conseguida en 2019.

“En orden a conseguir los mejores resultados deportivos posibles, es vital para todas las partes trabajar en perfecta armonía”, dijo Vettel este martes. “El equipo y yo hemos notado que no hay un deseo por seguir permaneciendo juntos”, agregó.

El contrato del alemán establecía un pago de US$ 40 millones por temporada, aunque él dice que la parte monetaria no fue decisoria. “Ese no es el punto cuando se trata de tomar decisiones acertadas”, señaló. Ferrari consiguió su último título de pilotos en 2007, con Kimi Raikkonen y el último de constructores en 2006.

Vettel lideró las temporadas en 2017 y 2018, pero una serie de errores no propios de su expertise, terminaron costándole muy caro. En Singapur 2017 consiguió la pole position, pero impactó con Max Verstappen (Red Bull) causando un choque múltiple que evitó Hamilton para ganar la prueba. En Alemania 2018 sucedió algo similar cuando lideraba e impactó las barreras dejando servida la victoria al británico de Mercedes-AMG.

En 2019 Vettel mostró también descontrol ante una decisión de los jueces en Canadá que lo penalizaron con tiempo extra. Al final de la carrera tomó los carteles del ganador y el segundo puesto, poniendo el 1 de la victoria frente a su Ferrari (técnicamente él había sido segundo). Luego vino Monza, el feudo de Ferrari, donde el germano perdió el control del monoplaza, se salió del asfalto y regresó a la pista, provocando el despiste de Lance Stroll.

Tampoco fue ayudado por las órdenes a veces erráticas del equipo. Además, su joven compañero Charles Leclerc le endosó una dolorosa derrota en carreras y en pole positions. El punto más crítico ocurrió en noviembre, durante el Gran Premio de Brasil, cuando ambos pilotos colisionaron y dejaron a Ferrari sin sumar una sola unidad.

Ahora que se conoce el alejamiento de Vettel, Leclerc subió una imagen a su cuenta con el mensaje “ha sido sido un gran honor ser tu compañero de equipo. Tuvimos algunos momentos tensos en la pista., otros muy buenos, pero siempre hubo respeto”.

A diferencia de Vettel, que concluía su vínculo ahora, Leclerc tiene contrato hasta fines de 2024. “No hay una razón específica para esta decisión, más allá del simple hecho de que nuestros caminos se alejaron”, dijo Mattia Binotto, jefe del equipo Ferrari.

Entre los nombres que se especulan podrían acompañar a Lecler como compañero en Ferrari para pilotar el monoposto SF1000, están el español Carlos Sainz y el australiano Daniel Ricciardo, hoy en McLaren y Renault, respectivamente. Mientras el español de 25 años mostró gran consistencia en 2019, el oceánico no tuvo un buen año con los franceses, pero dejó una buena impresión de sus temporadas en Red Bull. De llegar Saiz, dejaría la puerta abierta para un eventual retorno de Fernando Alonso al equipo británico.