El excongresista peruano Kenji Fujimori, hijo del expresidente Alberto Fujimori y hermano la excandidata presidencial Keiko, fue sentenciado el martes a cuatro años y medio de prisión por delito de tráfico de influencias, por una trama de compra de votos de parlamentarios en el 2018 para evitar la destitución del entonces mandatario Pedro Pablo Kuczynski.
La Sala Penal Especial de la Corte Suprema peruana indicó en su lectura del resumen de sentencia que la pena de prisión para Kenji queda suspendida hasta que decida la segunda instancia judicial, por lo que no ingresará a la cárcel inmediatamente.
El tribunal consideró que Kenji buscó comprar votos de congresistas para impedir que el Parlamento, controlado entonces por la oposición que lideraba su hermana Keiko, destituyera a Kuczynski de la presidencia de la República, en marzo del 2018, por sus presuntos negocios con la constructora brasileña Odebrecht.
También fueron condenados a prisión los excongresistas Guillermo Bocángel, Bienvenido Ramírez -para quienes la condena a prisión también queda suspendida hasta segunda instancia- y un asesor parlamentario, Alexei Toledo, quienes fueron cercanos a Kenji. Este último quedó con medidas alternativas a la prisión y debe comparecer ante el juez cada mes.