El representante de Rusia ante Naciones Unidas, Vasili Nebenzia, aseguró que Ucrania ya había declarado en diciembre su intención de volar la represa de Nueva Kajovka, en el río Dniéper, y cita un artículo del diario ‘The Washington Post’ en el que se afirma que las Fuerzas Armadas ucranianas habían incluso probado ataques con misiles Himars contra una de las esclusas de la central hidroeléctrica ubicada en la región de Jersón.

Además, durante su discurso en la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU recordó que Rusia ya había advertido en un documento publicado en octubre en el Consejo de Seguridad de la posibilidad de este ataque.

Por su parte, el representante permanente de Ucrania ante Naciones Unidas, Sergíy Kyslytsya, tachó de “predecible” la declaración de Rusia y les ha acusado de usar la “misma técnica” de culpar a otros de sus crímenes, y puso los ejemplos de Mariupol, Bucha, Izium y la central nuclear de Zaporiyia.

“Permítanme señalar que Rusia ha estado controlando la represa y toda la central de Kajovka durante más de un año. Es físicamente imposible hacerlo estallar de alguna manera desde el exterior mediante bombardeos. Ha sido minado por los ocupantes rusos. Y lo han volado por los aires.