El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, llega este martes a Israel y Cisjordania, en el cuarto día de un alto el fuego tras la nueva guerra sangrienta que han librado Israel y Hamás, pese a que la tensión sigue viva.

Blinken tiene previsto reunirse con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, antes de proseguir su gira por Egipto y Jordania, dos actores regionales vecinos de Israel.

El objetivo de la visita es “apoyar sus esfuerzos para consolidar el alto al fuego”, tuiteó el lunes Blinken, mientras que el presidente estadounidense, Joe Biden, dijo que el secretario de Estado hablará “del apoyo inquebrantable (de Estados Unidos) a la seguridad de Israel” y proseguirá los “esfuerzos del gobierno para reconstruir los vínculos con los palestinos”.

Durante el alto el fuego, los dos dirigentes dieron su apoyo a la “solución de dos Estados”, israelí y palestino, apoyada por la comunidad internacional y rescatada por el nuevo gobierno estadounidense antes de la crisis de las últimas semanas.

Pero los últimos comunicados del departamento de Estado y de la Casa Blanca no hacen referencia a la “solución de dos Estados”. “Nuestra prioridad es realmente, antes que nada, conseguir que el alto el fuego aguante”, dijo a los periodistas un alto funcionario estadounidense antes de que Blinken emprendiera su viaje, al considerar “prematuro” cualquier plan más ambicioso.

Pese a los intensos esfuerzos diplomáticos, las tensiones persisten en el terreno entre israelíes y palestinos.

Dos personas fueron heridas, entre ellas un soldado israelí, en un ataque con cuchillo en Jerusalén, no lejos del barrio de Seij Jarrah. El autor, un palestino de 17 años, según la agencia oficial palestina, fue abatido por las fuerzas de seguridad israelíes.