Un tribunal federal de Los Ángeles imputó el jueves nueve cargos relacionados con la evasión de impuestos a Hunter Biden, hijo del mandatario de EE.UU., Joe Biden, que se unen a otros tres delitos graves relacionados con posesión de armas por los que fue acusado a mediados de septiembre.

El hijo del gobernante estadounidense ha sido acusado de no pagar impuestos, de no declararlos, de evadir un gravamen y de presentar un formulario fraudulento, según el expediente judicial de 56 páginas y consultado por la cadena estadounidense NBC News.

La acusación aseguró que Hunter Biden “gastó millones de dólares en un estilo de vida extravagante en lugar de pagar sus impuestos” y que habría evitado cancelar compromisos por al menos 1,4 millones de dólares.

Los cargos, presentados por el abogado especial David Weiss, incluyen seis delitos fiscales leves que, unidos a los otros tres, podría enfrentarse a 17 años de cárcel. El caso ha sido asignado al juez Mark Scarsi, nombrado por el expresidente Donald Trump, que ha cargado en numerosas ocasiones contra Biden por las numerosas polémicas que rodean a su hijo, y que incluso han sido aprovechadas por el Partido Republicano para intentar plantear un “impeachment” (juicio político) al presidente Biden por los negocios de su hijo.