El pasado viernes 9 de julio, en el sector de Pidenco, Región de La Araucanía, falleció Pablo Marchant Gutiérrez (29) en medio de un enfrentamiento con la policía tras un atentado en la comuna de Carahue. Producto de este hecho, además, un trabajador forestal identificado como Ceferino González Marabolí (65), fue internado de gravedad en la UCI del Hospital de Temuco tras recibir un disparo en la zona abdominal, de un arma calibre 5.56.
El lunes de esta semana se realizó el velorio de Marchant Gutiérrez, custodiado por comuneros mapuche con armamento. En fotografías difundidas por Werken Noticias y viralizadas luego en redes sociales, se mostraba un grupo de individuos encapuchados resguardando el féretro, portando escopetas y una M16.
Según información proporcionada por la Fiscalía de La Araucanía, el día en que murió Marchant -exestudiante de antropología de la Universidad de Concepción-, se encontró una M16 en su poder. Por ello, el Ministerio Público inició labores de rastreo para dar con el origen del arma.
El lunes, luego de que se conocieran las imágenes del velorio, el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, informó que el gobierno ingresaría una querella. “Con respecto a las imágenes del velorio hemos presentado una querella para que la fiscalía actúe de oficio, justamente por la ley de control de armas, porque son armas que están prohibidas y no debiesen utilizarse bajo ninguna circunstancia, ni siquiera en un velorio”, sostuvo el jefe de gabinete.
La acción judicial fue presentada ese día en el Juzgado de Garantía de Traiguén y, según informó La Tercera, en ésta se expuso que “las armas que se aprecian en imágenes son armas largas con características distintivas de fusil y escopetas, en una cantidad superior en particular los fusiles serían modelo M-16. En este contexto, dichas armas tendrían las características de prohibidas, y se mantienen y están siendo portadas por diversas personas que se encuentran en dicho lugar”.
En esa línea, Interior solicitó una serie de diligencias al Juzgado de Garantía, como que el caso quede radicado en la Policía de Investigaciones (PDI) y que se hiciera ingreso al lugar donde se realizaba la ceremonia para requisar el armamento presente en el velorio.
El gobierno pidió también que se individualice a las personas que se ven en las imágenes y que se procediera “a realizar previa autorización judicial, diligencia de entrada y registro del lugar donde se encuentran las armas” y así efectuar la incautación del armamento “a la brevedad”.
En la querella se apuntaba a que la incautación se realizara lo antes posible ya que, “según se informa en las mismas redes sociales, este velorio durará hasta el día de mañana (martes), por tanto, existe claramente la posibilidad de que las armas luego sean retiradas del lugar y desaparezca la evidencia del ilícito denunciado”.
Este martes se realizó finalmente la ceremonia fúnebre de Marchant en el exfundo Pidenco. Hasta la zona, según los primeros antecedentes, solo podían ingresar integrantes de comunidades que han sido convocadas al sepelio que tendría lugar posteriormente en el cementerio de la misma comunidad, a partir de las 14 horas.
En las imágenes difundidas este martes se muestra nuevamente escolta con armamento y en horas de la tarde se registraron disparos al aire.
Gobierno: nadie puede “jactarse ni validar” el uso de armamento
Por su parte, el subsecretario del Interior, Juan Francisco Galli abordó el funeral armado, asegurando que nadie podía “jactarse ni validar” el uso de armamento.
“Las imágenes de las armas de fuego de alto calibre exhibidas hoy en el funeral de la persona fallecida en un ataque incendiario en que resultó también gravemente herido un adulto mayor trabajador forestal son solo el reflejo de lo que venimos denunciando en la Macrozona Sur. Llevamos meses incautando drogas, Armas y desbaratando bandas dedicadas al narcotráfico. No ha sido fácil, como consecuencia de ello, perdió su vida el inspector Morales en Temucuicui. Así también fueron asesinados el ahora SOM Nain Caniumil y el sargento Benavides”, dijo Galli.
El subsecretario agregó que “no solo ha sido droga, hace días conocimos de la comisión de uno de los delitos más graves contra los DD.HH. Personas que secuestraron, torturaron, asesinaron y quemaron a otras en busca del mismo tipo de armamento que vimos hoy. Justamente por eso, para evitar esa violencia, nadie puede ni jactarse ni validar el uso de armamentos de guerra, que solo sirve para matar a otros”.