"Perdón por la pinta", dice Banderas riéndose apenas entra al frontis del club Rock y Guitarras en Ñuñoa. Afuera, una veintena de extras caracterizados como fanáticos de un grupo de rock esperan entrar a filmar la última escena de la película, donde el rockero Turk Henry (Banderas) da un concierto. El español ostenta una vistosa peluca, una polera negra sin mangas, las uñas pintadas del mismo color, y un pantalón brillante. Todo para interpretar al protagonista de Salty, la película que el director Simon West graba en Chile. El personaje es una estrella de la música venida a menos que está de vacaciones en Chile junto a su mujer (Olga Kurylenko, ex chica Bond), cuando unos piratas locales -sí, piratas- la secuestran, lo cual lo lleva por una disparatada aventura por toda Sudamérica buscándola (aunque toda la cinta se grabará en Chile). Entremedio, un excéntrico agente norteamericano lo persigue por los problemas que genera en su búsqueda.
"Chile se tiene que poner de moda", asegura Banderas. "Es el país en hispanoamérica que más se asemeja a mi propio hogar en España. Es un país que está creciendo mucho y se nota".
"Es una película que hemos tenido que armar en muy poco tiempo, y para eso se necesitaba un equipo técnico y humano muy serio. Y en Chile el equipo que tenemos es magnífico, la gente de vestuario, de maquillaje, los electricistas, el departamento de arte. Ya lo habíamos comprobado cuando se hizo Los 33", continúa Banderas, quien luego describe a su personaje: "Es un rockero clásico, tipo Roger Daltrey o Robert Plant. Pero tiene 55 años, ya viene de vuelta. Es hispano, pero reniega de su hispanidad. A partir de lo que le ocurre aquí, se reencuentra con sus raíces".
"Con Antonio ya nos habíamos juntado cuando vino a filmar la vez anterior. Y desde esa época que se están trabajando en incentivos para que se realicen más producciones en Chile", asegura el ministro de Cultura Ernesto Ottone, agregando: "Gracias a Film Comission de Chile tenemos ciudades llamadas film friendly, que son lugares a los que los equipos pueden llegar e instalarse a filmar con los mayores beneficios posibles. Apostamos a la internacionalización como marca chilena".
Detrás de Banderas, llega Olga Kurylenko. La ucraniana se encuentra filmando por segunda vez en Chile, luego de grabar en el desierto de Atacama parte de Quantum of solace, de la saga James Bond. "Adoro este país. El lugar más bonito que he visto en mi vida es el Valle de la Luna", asegura la actriz. Kurylenko interpreta a Sheila, una ex modelo que también está lejos de su época de gloria. Sobre su nueva experiencia grabando en Chile, la ucraniana asegura: "Esta es una película muy distinta, al tratarse de una comedia. Es una atmósfera muy relajada. El guión es muy gracioso y bromeamos todo el tiempo.En una película de acción todo es muy estricto".
Durante su secuestro, Sheila establece un vínculo romántico con su captor, el Capitán Juan Carlos, interpretado por el británico Ben Cura. "El lidera a un grupo de chilenos desencantados con el sistema, y que deciden transformarse en piratas. En su cabeza, quiere salvar el mundo", dice el actor, "Yo vi a Antonio en El Zorro cuando tenía siete años. Pensar que estoy actuando con él, 20 años después, es genial".
Como se trata de una comedia disparatada, tiene que haber un villano igual de disparatado. Ahí es cuando entre Mark Valley (Boston Legal). "Es un agente norteamericano que persigue a Turk por los problemas que genera en Chile. Lo odia por representar todo lo que mi personaje no es. Se cree comando y tiene todo un arsenal de armamento. También tiene un reptil mascota, que lo usará para complicar las cosas", dice Valley riéndose.