La alicaída economía de EEUU se ha convertido no sólo en un problema político para el Presidente Barack Obama, sino también en un problema de imagen del mandatario frente a los votantes, de cara a los comicios de 2012. Así se desprende de un sondeo publicado hoy por la Universidad Quinnipiac.

De acuerdo con la encuesta, más del 60% de los estadounidenses desaprueba la gestión económica del mandatario y cerca de la mitad cree que el precandidato presidencial republicano Mitt Romney haría una mejor labor.

El sondeo deja de manifiesto el creciente desencanto del electorado con el mandatario estadounidense, que incluso hoy continuó promoviendo su plan para la creación de empleos en Estados Unidos.

"Las tendencias no son buenas para el Presidente Barack Obama, su nivel de desaprobación ha aumentado en un 9% desde el verano (boreal), del 46% en julio a 52  en septiembre, y ahora se ubica en 55%", explicó en un comunicado Peter Brown, subdirector del Instituto de Encuestas de la Universidad Quinnipiac.

Según la encuesta, el 64% de los votantes desaprueba la gestión económica de Obama, lo que supone su mayor nivel de desaprobación de todos los tiempos, y sólo el 32% la apoya. Sólo el 41% de los encuestados dijo aprobar la gestión general de Obama, mientras que el 55% la rechaza.

Peor para Obama, que intenta afianzar el voto de su base, es que los encuestados creen que Romney, ex gobernador de Massachusetts, haría una mejor gestión económica. Un 49% lo cree.

Mientras, el gobernador de Texas, Rick Perry, que también figura como favorito entre los aspirantes republicanos, obtiene una aprobación del 45%.

FACTOR GEORGE W.BUSH
La encuesta señala que el 51% de los votantes sigue culpando al presidente George W. Bush por los males económicos del país, en comparación con el 32% que opina lo contrario.

Para Brown, el mayor desafío que afrontará Obama de cara a los comicios del próximo año es convencer a los votantes de que su eventual rival republicano es, en realidad, un "calco" de Bush.

Sin embargo, la incertidumbre sobre la marcha de la economía y si ésta mejorará con un segundo mandato de Obama "no es una buena señal" para el gobernante, agregó Brown.

Según sondeo, los demócratas siguen leales a Obama, ya que aprueban su gestión presidencial con un 77%. Sin que cause sorpresas, entre los republicanos el nivel de desaprobación es de un 91%.

Entre los votantes independientes, el nivel de desaprobación de Obama es de un 56 %, según la encuesta.

Por otra parte, un 44% de los votantes creen que la economía estadounidense está empeorando en vez de mejorar y sólo el 29 % cree que las condiciones económicas mejorarían si Obama gana la reelección el 6 de noviembre de 2012.

La encuesta se realizó entre el 27 de septiembre y el 3 de octubre a una muestra de 2.118 votantes registrados y tiene un margen de error de 2,1 puntos porcentuales.