El cobre descendió por segundo día consecutivo en un mercado que sentía el impacto de un aumento de los inventarios. Aparte, la percepción del riesgo financiero estaba afectada por las persistentes preocupaciones acerca de la deuda, antes de una cumbre de la Unión Europea (UE) convocada para buscar soluciones ante la crisis de la deuda de la región.

El metal rojo para entrega en tres meses cerró en US$4,10 la libra en la Bolsa de Metales de Londres (LME, por sus siglas en inglés), un retroceso de 0,56% frente a los US$4,12 del cierre de ayer.

"Vimos los precios en un nuevo récord hace un par de días y desde entonces bajaron un poco", dijo Max Layton, analista de Macquarie Securities. "Algunas señales dicen que el cobre, particularmente en China, no está tan ajustado ahora", dijo. "Las cuestiones (de la deuda europea) han estado en el fondo durante meses".

China, mayor consumidor mundial de metales, podría regresar al mercado en febrero-abril del próximo año, agregó Layton.    

El euro volvía a subir contra el dólar el jueves antes de la cumbre de la UE, con la deuda de la zona euro aún afectando a la percepción del riesgo.

Los líderes de la UE se reúnen el jueves y el viernes en Bruselas, con el fin de acordar nuevas medidas que sirvan para resolver una crisis de la deuda que ya lleva un año y que amenaza con extenderse a Portugal y España.

Otro factor que pesaba sobre la confianza del mercado del cobre era la evolución de los inventarios en la LME.

El miércoles, las existencias de cobre ascendieron 2.850 toneladas a 360.800 toneladas, contrarrestando una tendencia en la cual los inventarios habían bajado desde el máximo en seis años y medio de 555.075 toneladas visto a mediados de febrero.