Desde hace algunas semanas que los santiaguinos han observado cómo Metro está interviniendo diferentes puntos de la ciudad, debido a las construcciones de las futuras líneas 3 y 6. Pero, a diferencia de como ocurría antaño cuando se rompían grandes extensiones en superficie, hoy la empresa está trabajando sobre puntos específicos.

Esto sucede porque Metro está interviniendo la ciudad a través del método NATM (New Austrian Tunnelling Method), que consiste en la construcción de estaciones e interestaciones por tuneleado, es decir, sin abrir la superficie (ver infografía). Según explica la empresa, gracias a este método se puede perforar la ciudad en diferentes niveles, minimizando las perturbaciones a la comunidad y haciendo eficiente la construcción.

Ambas líneas tendrán un trazado subterráneo y esta metodología se utilizará en todas las obras, con excepción del centro cívico -entre las estaciones U. de Chile y Plaza de Armas-, ya que allí se construirá desde la superficie dado que no hay extensiones de terreno que permitan la construcción del pique y por el cuidado que requieren los 27 edificios patrimoniales emplazados en el sector.

Según explicó Jaime Adasme, gerente de Desarrollo de Proyectos, están buscando causar el menor impacto. Es por ello que "constantemente estamos mirando las mejores alternativas y trayendo las mejores prácticas para que nuestra construcción sea moderna y cada vez menos invasiva".