Desde que el terremoto dejó al Puente Llacolén como única vía para unir a Concepción con la comuna de San Pedro de la Paz y la Provincia de Arauco, en la Región del Biobío, los camiones de carga se han visto en la imposibilidad de transitar por el viaducto que pasa sobre el río Biobío durante el día, lo que sólo pueden hacer entre la medianoche y las 6.00, con el fin de no sobrecargar el averiado puente, que además se encuentra en reparaciones.

Hace cuatro meses se anunció un proyecto denominado "Habilitación de Emergencia Conectividad Fluvial Río Biobío", que con un sistema de barcazas, cuyos accesos estarían en la desembocadura del mencionado río por el lado norte y en el sector de Boca Sur por el sur, le permitiría a cerca de 200 camiones cruzar en cada jornada, que actualmente utilizan como alternativa para llegar a la Provincia de Arauco un camino cercano a Los Angeles que significa varias horas más de viaje, generando un importante gasto.

Pero tras la larga espera por diversos permisos, problemas con la subida del río a causa de las lluvias y la no llegada de las dos barcazas, se espera que el proyecto, que ha demandado un gasto de $1.150 millones en sus accesos, finalmente la próxima semana entre en funcionamiento. El mismo estará a cargo de la sureña Naviera Paredes, dueña de las embarcaciones y también de la empresa Corbel (Ingeniería, Servicio, Montaje y Transporte Limitada).

Por ahora sólo falta que lleguen los dos transportes que se utilizarán. "Pensamos que a mediados de la próxima semana debiera estar operando el tan pedido sistema de las barcazas, ya que debieran llegar el domingo. Ahí se harán unas pruebas y ajustes finales para ver si necesita una corrección, para que empiece a operar con toda la seguridad necesaria", señaló el seremi de Obras Públicas, Carlos Guzmán, quien agregó que  "el retraso se produjo por el clima, pero los barcos ya se encuentran con permiso para zarpar desde Chiloé".

Cada una de las embarcaciones podrá transportar por viaje a tres camiones (dependiendo del largo que éstos tengan) y el costo será de $62.500 pesos por vehículo. Se espera que se mantenga por unos cuatro meses, considerando que en noviembre los puentes Llacolén y Juan Pablo II debieran estar en condiciones de funcionar normalmente.