El ministro de salud, Jaime Mañalich llegó en las últimas horas hasta Concepción para informarse respecto a la condición médica de los cinco comuneros mapuche detenidos en la cárcel El Manzano de esta ciudad, quienes junto a otros 29 personas llevan más de 60 días en huelga de hambre en demanda de que sus causas penales no sean procesadas bajo la ley antiterrorista ni por la justicia militar.

Mañalich llegó hasta el Hospital Regional, donde conoció el estado del comunero Ramón Llanquileo, quien se autoinfirió cortes que obligaron a trasladarlo al recinto asistencial. Luego de conversar con el comunero, el ministro indicó que la situación de los mapuches en huelga de hambre es preocupante y que ya están dispuestos los mecanismos de asistencia en caso que la condición médica se complique.

"Nos informamos directamente de cuál es la situación de salud de cada uno de estos comuneros dentro de las limitaciones que hemos tenido hasta aquí para evaluarlos, ya que algunos de ellos no se dejan pesar y la mayoría no acepta que se le hagan exámenes de sangre, pero así y todo hemos podido configurar un diagnóstico que es preocupante. En ese sentido hemos dispuesto que algunos recintos hospitalarios deben estar preparados para recibir a estos compañeros chilenos en el caso que deban ser tratados", indicó el ministro.

El secretario de Estado criticó a los diputados que en los últimos días se sumaron en Temuco a la huelga de hambre de los comuneros mapuches. "Pediría que aquellas personas que dicen que van a entrar en huelga de hambre, tuvieran el coraje de entender de lo que están hablando. Hacer un ayuno de dos o tres días y aparecer en los medios de comunicación puede ser realmente interesante, pero si los diputados o quienes están interesados de participar en un proceso que por definición tiene que durar 60 días para ser una huelga de hambre en serio -en la cual reciban sólo hidratación oral- si esa va a ser la decisión, bien. Mientras eso no ocurra, creo que son sólo alarmas irresponsables", precisó.

El ministerio de salud ya dispuso de equipos médicos para visitar a los comuneros internados en las cárceles de Concepción y Lebu, para así tener un diagnóstico certero de su condición.