Beijing busca fortalecer los lazos con Rusia, país que en las últimas décadas ha sido el gran aliado de China entre los países que marcan la pauta en el plano diplomático, sobre todo en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.

Esto se vuelve clave en momentos en que las relaciones con Estados Unidos se encuentran en un estado de tensión por las acusaciones mutuas de espionaje cibernético y los deseos de Washington de aumentar su influencia en esa zona del Pacífico.