Los senadores DC integrantes de la Comisión de Constitución del Senado, Soledad Alvear y Patricio Walker, entregaron hoy su apoyo de manera oficial al proyecto de Acuerdo de Vida en Común (AVC), que apunta a regular las parejas de hecho, tanto heterosexuales como homosexuales.

La senadora Alvear, presidenta de la comisión, comentó que "el proyecto constituye un avance al hacerse cargo de la realidad de millones de chilenos que han construido sus familias de manera distinta al matrimonio tradicional".

En esa línea, la parlamentaria afirmó que "se trata de una mayoría que no se casa, que forman hogares y que requieren protección legal, destacando a las personas homosexuales que hoy no tienen ninguna alternativa para formalizar ante el derecho sus relaciones de pareja".

Alvear añadió además que los instrumentos jurídicos vigentes "no se hacen cargo de una serie de problemas sensibles para las parejas que conviven, como es el caso de los derechos sucesorios entre convivientes, los derechos previsionales, de salud, etcétera".

En tanto, el senador Walker dijo que este proyecto "no admite más dilaciones", y que por esta razón, "y a pesar de no tener urgencia legislativa, el proyecto se pondrá en tabla en la comisión de Constitución en los próximos días".

"Aunque compartimos la idea de legislar, en el debate propondremos una serie de elementos nuevos y mejoras al proyecto, muchas de las cuales dependen del gobierno, por lo que pedimos al Presidente de la República no dilatar más la decisión de patrocinar una serie de indicaciones", agregó el senador.

En ese sentido, Walker dijo que es "indispensable" que estos acuerdos se inscriban ante el Registro Civil, porque "no corresponde que se celebre el contrato sólo ante un notario, esto no es una compraventa o un contrato de arriendo. El Estado debe concurrir al reconocimiento de estas uniones por la vía de su inscripción en el Registro Civil, la que, además, resulta esencial para evitar fraudes".

Finalmente, los senadores DC anunciaron un conjunto de indicaciones para mejorar el proyecto, como el establecimiento de resguardos para evitar que este nuevo contrato pueda utilizarse para eludir los derechos sucesorios de otros familiares, por ejemplo, estableciendo un plazo a la convivencia para que produzca efectos sucesorios.