En modo "wait and see" (esperar y ver) se podría definir la estrategia que actualmente están manejando las empresas en Chile en materia de inversión.

¿Esperando qué? De acuerdo al Informe de Percepciones de Negocios del Banco Central, que contempló respuestas de alrededor de 200 empresas a lo largo del país, "una porción considerable de encuestados que tienen proyectos en carpeta señalan estar esperando las definiciones electorales para decidir respecto de su concreción". Esto luego de que, según los propios consultados, la incertidumbre en el ámbito político-económico explicara la ausencia de proyectos relevantes de inversión en el último tiempo.

De hecho el sondeo, reveló que de las firmas que poseen proyectos en carpeta, éstos no se ejecutarían sino hasta 2018, año en el que en forma mayoritaria prevén una disminución de la incertidumbre en materia política y económica.

Al respecto, desde el mundo privado sostienen que la incertidumbre y desconfianza generadas por algunas políticas públicas, han jugado un rol clave en la paralización de la inversión (que completó en 2016 tres años negativos consecutivos) y que efectivamente las elecciones jugarán un rol clave en las decisiones hacia adelante.

Visión empresarial

El presidente de Sofofa, Hermann von Mühlenbrock, señala que "los empresarios toman sus decisiones por las variables que afectan la viabilidad de los proyectos, no por consideraciones políticas", pero advierte que "el problema es que las elecciones generan incertidumbre sobre cómo se verán afectadas esas variables. Si no hay un cambio profundo de temas fundamentales como el tributario, laboral, o si no se despejan las incertidumbres en torno a las reformas a la Constitución o al derecho de propiedad, es difícil que se recupere la inversión y se reactive la economía".

Asimismo Manuel Melero, presidente de la Cámara Chilena de Centros Comerciales, explica que "aquí hubo varios factores de incertidumbre por iniciativas del actual gobierno en materia tributaria, laboral y constitucional, y derechos de agua, que movieron negativamente las confianzas, y ahora veo en el tema de las inversiones que hay perspectivas un poco más positivas de cara a la elección presidencial", precisando al respecto que "de eso se puede sacar la lectura que se quiera, pero creo que empiezan a mejorar los ánimos, los empresarios están leyendo las encuestas que tienen un resultado que todos conocemos".

Comparte Ricardo Mewes, presidente de la Cámara Nacional de Comercio. "Hay que despejar la incertidumbre para empezar a dibujar los proyectos de inversión, porque el empresariado necesita a lo menos un espacio de certezas para ello. Ese espacio claramente no se ha visto. Hay un problema de desconfianza en las políticas públicas en materia de crecimiento económico, por lo que no se han generado esas confianzas para invertir".

En tanto, para Patricio Crespo, ex titular de la Sociedad Nacional de Agricultura, "con un abanico tan abierto y posiciones tan radicales, es natural y evidente que los actores privados prefieran no arriesgarse. Forma parte de la racionalidad de toda inversión, que en el sector agricultura implica proyectarse a 20 años".

En este sentido advierte que si en las elecciones se sobrepone un candidato que no asegure esas certezas, "será natural que la inversión pueda seguir paralizada. Con las expectativas y confianzas no se debe jugar, y cuando la política no habla con transparencia se genera más desconfianza y paralización, que es lo que se ha cosechado en estos años".

Construcción

El documento del ente rector, expuso además que sectorialmente, quienes participan directa e indirectamente en la construcción se muestran, en general, más negativos en sus percepciones respecto a otras áreas.

En esta línea, los encuestados destacaron la mayor dificultad en las ventas de viviendas, la reducción de la compra de insumos y el retraso o cancelación de proyectos.

En el caso de la zona centro, los entrevistados señalaron que los proyectos habitacionales siguen sosteniendo el resultado del negocio, principalmente por el lado de las viviendas con subsidio. Respecto del resto de la edificación habitacional se sigue contemplando menos proyectos para este año respecto de los anteriores.