El Producto Interior Bruto de Cataluña creció 3,3% en 2017, dos décimas por encima de la media española (3,1%), a pesar de la crisis política independentista que generó incertidumbre económica, según los datos oficiales publicados este viernes.

En el mismo periodo, la región de Madrid, que representa como Cataluña alrededor de una quinta parte de la riqueza española, registró un crecimiento del 3,4%.

La economía de Cataluña se ralentizó en el último trimestre cuando entre enormes manifestaciones, violencia policial en el referéndum ilegal de autodeterminación y la incertidumbre ante una posible secesión cayeron, al menos puntualmente, la llegada de turistas, las inversiones y el consumo local.

Alrededor de 3.200 empresas pidieron trasladar su sede social fuera de Cataluña entre principios de octubre y finales de diciembre, sin que el número preciso de marchas se conozca todavía.

Cataluña se mantuvo en 2017 como una de las regiones con mayor PIB per cápita en España, después de Madrid y las regiones de Navarra y País Vasco, que disponen de un régimen fiscal muy ventajoso.

Para 2018, el gobierno prevé un crecimiento a nivel nacional de 2,5%. El Banco de España pronostica un 2,7%.