Andrés Couve Correa, nuevo ministro de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (CTCI), tendrá que trabajar en una serie de desafíos y en ese contexto, la comunidad científica le plantea algunos que serán prioritarios en su debut en la cartera.
El propio Couve señaló poco después de su presentación por parte del presidente Sebastián Piñera que se trata de una tarea muy exigente, "una tarea administrativa donde tenemos que instalar el Ministerio utilizando todas las capacidades, todo el conocimiento que tenemos, pero también siendo exigentes con lo que el país necesita para esta nueva etapa".
La subsecretaria de la cartera, Carolina Torrealba, estableció que junto al ministro van a trabajar intensamente. "No solo buscará impulsar la generación del conocimiento, sino que también su aplicación en el país, y ahora en un marco que nos permite mayores estrategias, mayor visión a largo plazo. Esto tiene una historia larga, celebramos un hito para la historia de la ciencia y la investigación".
Alexis Kalergis, director del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia, cree que el nombramiento de Andrés Couve y Carolina Torrealba, "es un gran acierto del Gobierno que estoy seguro potenciará la ciencia de nuestro país. Ambos cumplen con los atributos que se necesitan para implementar e iniciar la marcha del nuevo Ministerio", asegura.
"Una de las primeras tareas del nuevo ministro será darle forma al Ministerio con un presupuesto más bien restrictivo, pero que esperamos que rápidamente mejore. Otro desafío importante es posicionar a la ciencia y el conocimiento en nuestra sociedad, desde sus autoridades hasta la ciudadanía en general", agrega Kalergis.
Miguel Allende, académico de Biología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Chile y director del Centro de Regulación del Genoma, coordinador del proyecto 1000 Genomas, señala que una de sus primeras tareas será "convocar a los actores relevantes para plasmar la visión de país que se busca en el ámbito del desarrollo científico y tecnológico. Debe motivarnos a los científicos a vincularnos directamente con los desafíos del país y poner de relieve nuestro lugar en el continente; también convencer al aparato estatal que la mejor inversión que podemos hacer es en el desarrollo de nuestros cerebros. Y al mundo empresarial, mostrar que las innovaciones made in Chile son las más valiosas porque potencian y diversifican nuestra economía".
Francisco Martínez, decano de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la U. de Chile, también señala que su éxito dependerá mucho "de que cuente con recursos adicionales importantes".
Sergio Lavanderos, director del Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas, añade que "la ciencia, y es lo que Andrés expresa, está en todas partes, no se puede separar de la educación, de la economía y la visión que él tiene es perfecta. Obviamente las tareas son difíciles complejas, pero ambos tienen las capacidades como para sacar adelante todo esto. Con respecto a su obligación inmediata, es el mandato de organizar el Ministerio. Hay una serie de tareas concretas que requieren pronta atención, yo me focalizaría a esa y obviamente en proyectar nuestra la ciencia a un nivel mayor del que estamos".
Manuel Kukuljan, decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Chile, en la cual Couve es profesor titular del Departamento de Neurociencia de la Facultad de Medicina, señala que "una tarea inmediata es armar un Ministerio funcional y sobretodo articular las muchas cosas dispersas que hay en términos de ciencia y tecnología en Chile. "Como por ejemplo la Iniciativa Científica Milenio está en un ministerio, hay proyectos que están en otros ministerios, hay iniciativas por varias partes que de alguna manera tienen que hacerse más congruentes y más articuladas".
Para Laura Gallardo, directora del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR2) y académica del Departamento de Geofísica de la U. de Chile, tiene múltiples desafíos. "Por una parte de instalar una institucionalidad, ordenar lo que existe, generar el ministerio en el nivel y la categoría que corresponde, y responder a múltiples alternativas que existen dentro de la comunidad científica pero sobre todo hacer un Ministerio que sea tomando en cuenta a la hora de tomar las decisiones claves para un desarrollo sostenible".
Según Gabriel León, bioquímico y divulgador científico de la U. Andrés Bell, "sus desafíos son enormes: sentar las bases de la institucionalidad, tanto en Santiago como en regiones. Deberá administrar la investigación, regularla y fomentar el trabajo científico".