Estudio en cádaveres revela que uno de los síntomas más reconocidos del Covid en realidad podría deberse a un daño cerebral

Foto: AP

Científicos de la Universidad Johns Hopkins pudieron identificar una relación entre la pérdida del olfato y daños provocados en células nerviosas encargadas de captar e interpretar el olfato a nivel cerebral. Este síntoma, que se presenta en alrededor de un 40% de las personas contagiadas, podría ser provocado directamente por el virus, aunque existen posturas contradictorias al respecto.


Es el síntoma más llamativo de esta pandemia, y también uno de los que menos se conoce su origen. Un reciente estudio del Departamento de Patología de la Universidad Johns Hopkins dejó en evidencia que la pérdida de olfato en enfermos de Covid-19 podría estar relacionada a un daño cerebral. Si bien, este síntoma no es manifestado por todas las personas que se han infectado por coronavirus, suele ser un indicio inequívoco de esta enfermedad.

Hasta ahora no se sabe muy bien por qué ocurre la interrupción de este sentido, ni tampoco se conoce a cabalidad qué implica que esto pueda ser transitorio, o una secuela que en algunos casos se hace irreversible.

El neurólogo y electromiografista de la Clínica Vespucio, Dr. Iván Vidal, enfatiza que con respecto a este síntoma hay que tener consideración en dos tipos de daños. “El primero es por inflamación, y ese daño es reversible si se dan los soportes adecuados. Sin embargo, también se han descrito fenómenos microvasculares y de pérdida axonal que haría que los síntomas se vuelvan más sostenidos, e incluso permanentes en los casos de los bulbos olfatorios”, señala el especialista.

La reciente investigación fue publicada en la revista médica JAMA Neurology, y detalla que los pacientes con Covid-19 analizados tenían dañados algunos vasos sanguíneos y células nerviosas -conocidas como axones- que se comunican con la parte del cerebro que procesa el olfato. En contraste, se analizaron también a pacientes que no tuvieron cambios en el olfato durante esta enfermedad, e incluso a pacientes que no tuvieron Covid.

Lee también en Qué Pasa:

De la conclusión de este trabajo realizado por los investigadores norteamericanos se determinó una relación entre el daño en estas zonas donde es procesado el olfato, específicamente en el piso superior de la cavidad nasal, con quienes sufrieron infección por SARS-CoV-2. Esto conllevó a conocer más sobre esta enfermedad que azota al mundo hace más de dos años, pero que todavía tiene muchas interrogantes con respecto a éste, como también a otros síntomas del Covid-19.

La doctora Sofía Waissbluth, del Departamento de Otorrinolaringología de la Universidad Católica, explicó a La Tercera que aproximadamente entre un 30% y un 40% de los pacientes afectados por el Covid-19 presentan alteraciones del olfato o el gusto. Además, agregó que pacientes menores de 40 años tienen mayor predisposición de desarrollar la forma de Covid, que se manifiesta únicamente por alteraciones del olfato o del gusto.

Sin embargo, las interrogantes sobre la pérdida del olfato, y sobre la sintomatología de la enfermedad provocada por el virus SARS-CoV-2 aún está lejos de ser clara para la comunidad médica y científica. “La diferencia de presentación de síntomas en los pacientes refleja la naturaleza heterogénea de la enfermedad. Tenemos una variedad de pacientes que van desde no presentar ningún síntoma hasta pacientes que han fallecidos producto de esta enfermedad. El espectro es muy grande, y pueden haber distintos síntomas en mayor o menos grado de afectación en quienes se han infectado con este virus”, explicó el Dr. Vidal al respecto.

Lo que aún se desconoce sobre el Covid

Si bien, el estudio pudo establecer una relación entre la pérdida del olfato en pacientes de Covid-19 con el daño en las neuronas que captan y procesan esta sensación, no es posible afirmar el mecanismo de acción que tiene el virus para interrumpir de manera temporal o permanente el olfato. Según detallan los científicos, es posible que esta condición sea causada directamente por lesiones creadas por el coronavirus, o indirectamente por síntomas como la inflamación de las mucosas.

Hasta ahora existen teorías al respecto que sugieren que el coronavirus ingresa a las células nerviosas relacionadas con el olfato a través de la membrana mucosa. Pero también se ha encontrado evidencia contradictoria sobre si el virus puede propagarse a este tipo de células, según precisaron los investigadores del estudio en cuestión, quienes además concluyeron que el daño al bulbo olfatorio no fue causado directamente por el coronavirus, sino que podría haber sido ocasionado por la inflamación inducida por el Covid-19.

Eso sí, lo más reportado en función del Covid hasta ahora apunta al sentido olfatorio y del gusto. Pero, además, existen otro tipos de afecciones cerebrales que podrían estar relacionadas con esta enfermedad. “Hay publicaciones recientes que relacionan el Covid al desarrollo de accidentes cerebrovasculares, tanto isquémicos como hemorrágicos; y también a fenómenos como la enfermedad de Guillain-Barré”, agrega el neurólogo de la Clínica Vespucio. Esta última afección ocurre cuando el sistema inmune ataca los nervios, provocado por una infección bacteriana o viral.

olfato covid

Otro de los síndromes que se han podido identificar, mas no detallar su mecanismo de acción, es el Síndrome Post-Covid. Este, según explica el Dr. Vidal, puede afectar el sistema nervioso central de manera tanto orgánica como a nivel de los neurotransmisores. En sus distintas gravedades puede generar cuadros depresivos o trastornos ansiosos en pacientes que hayan padecido de Covid-19.

Hasta ahora aún es una interrogante saber cómo se origina la pérdida de olfato en una infección por coronavirus, solo se pudo demostrar que existe una relación entre la enfermedad y el daño en ciertas células que interpretan las señales nerviosas gatilladas por olores. Para los pacientes que experimentan pérdida del olfato a largo plazo existen tratamientos que se están probando de forma pionera en Reino Unido. Estos van desde insertar esponjas humedecidas con plasma en la nariz hasta tomar Mesilato de Camostat, un fármaco destinado a tratar la inflamación del páncreas.

Aún es un enigma el mecanismo de inhibición del olfato de Covid-19, por lo que aún es pronto para presentar una solución definitiva a este síntoma tan característico de esta pandemia. Los científicos de la investigación recientemente publicada proyectan que los futuros estudios sobre el impacto de Covid-19 en el bulbo olfativo también puedan arrojar luz sobre otras formas en que la enfermedad afecta el cerebro.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.