Ammán es una ciudad que mezcla antigüedad con modernización

Un destino moderno, que convive con edificios tradicionales en las nuevas urbanizaciones de la capital jordana.




Amman, es la capital del reino de Jordania, mezclan los edificios antiguos con las nuevas tiendas de diseño y los restaurantes internacionales. A 45 minutos por carretera se encuentra el lugar donde, según la tradición, Jesús fue bautizado en las aguas del río Jordán.

La ciudad alberga a musulmanes (90%) y cristianos. Conocida como la Ciudad Blanca, porque las colinas están cubiertas de un revoltijo de casas de piedra de colores, con sus techos planos, característicos de una ciudad del desierto, esta mezcla se puede ver sobre todo en el centro de la ciudad, en los alrededores de la Mezquita del Rey Hussein, centro vital de la ciudad.

Las calles de Amman están llenas de mercados exóticos, con aromas intensos.

QUE VISITAR
Ciudadela de Amman: Desde su posición en una colina que domina toda la ciudad, la ciudadela fue testigo de toda la historia de la ciudad. Ruinas y antigüedades se han excavado y todas van al Museo Arqueológico de Jordania. Estando allá puede visitar el Palacio Omeya Al Qasr, una pequeña basílica bizantina; el Templo de Hércules; el Gran Templo de Amman; el Museo Arqueológico de Jordania donde hay piezas de más de 700.000 años, sarcófagos de la Edad de Hierro, papiros del Mar Muerto y mucho más.

Teatro Romano de Amman: Debajo de la ciudadela se encuentra el teatro romano, una reliquia impresionante de la antigua ciudad romana. Tiene capacidad para seis mil personas y aún se utiliza para algunos eventos. Dos museos culturales se pueden visitar en el complejo.

La Estación de Tren Hedjaz: Esta estación es como un túnel del tiempo hacia el pasado. De aquí salen trenes que se dirigen a Damasco y tardan ocho o nueve horas. Hay una muy buena colección de locomotoras de vapor, que se utilizan para las excursiones turísticas. Además se puede visitar un interesante museo del ferrocarril.

GASTRONOMIA
Lo mejor de Ammán es la carne de cordero y la de pollo. Seguramente los platos siempre vendrán salteados con algo de verdura y se suele comer acompañado del clásico pan jordano, que se hace sin levadura y que no es alargado, sino en forma de torta. El plato más característico en Jordania es el mensaf, elaborado con arroz, trozos de carne de cordero y una salsa de yogurt.

EXCURSIONES
La ciudad de Jerash es un buen lugar para excursionar, situada cincuenta kilómetros al norte de Ammán. Es una de las más visitadas de Jordania, porque se considera uno de los vestigios romanos mejor conservados del mundo.

Al este de Ammán, en dirección a Arabia Saudí e Irak, está la gran llanura desértica de Castle Loop, donde se levantan un gran número de ruinas históricas de castillos, fortalezas y palacios.

A 45 kilómetros está el Mar Muerto, el punto más bajo de la Tierra, con 407 metros por debajo del nivel del mar, con alta concentración de sal, desprovisto de vida animal o vegetal.

El Monte Nebo, es el lugar más sagrado de Jordania, porque se cree que es la tumba de Moisés, donde se subió para ver la Tierra Prometida y Madaba, conocida como la ciudad de los mosaicos, famosa por estos mosaicos omeyas y bizantinos de los siglos V al VII, que se halla a sólo 30 kilómetros al sur de Ammán.

COMO LLEGAR
La mejor manera de llegar a Ammán es a través de su Aeropuerto Internacional Reina Alia, a 32 kilómetros al sur de la ciudad. Para llegar desde el aeropuerto puede tomar taxis amarillos que son fiables y baratos, con precios fijos.

También hay un servicio de autobús, que sale cada 30 minutos, entre las 07.00 y las 22.00 horas, y cada 60 minutos entre las 22.00 y las 07.00 horas, y que tiene un valor de 1,5 dinares por persona (aproximadamente 1.000 pesos) y 0,25 dinares (200 pesos) por maleta.

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