La columna de Ana Amar: “Sostenibilidad, la clave del desarrollo de las empresas chilenas”

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"En un contexto de vacas flacas, los criterios ESG podrían verse como un lujo. Sin embargo, esa óptica se aleja de la realidad. Estamos convencidos que la aplicación de políticas ambientales, sociales y de gobernanza son una inversión, pues incrementan la productividad de los trabajadores y permiten que las empresas puedan modernizar sus modelos de negocios con una visión de futuro".


El 2023 fue un año lleno de complejidades. De acuerdo a las proyecciones del Informe de Política Monetaria (IPoM) de diciembre, del Banco Central, la economía chilena experimentará un nulo crecimiento en 2023 y el próximo año se expandirá moderadamente, en un rango que no superará los 2,25%. A ello se suma un desempleo cercano al 9% y el aumento del 18% de las empresas en procedimientos de quiebra, según datos de la Superintendencia de Insolvencia y Reemprendimiento.

En un contexto de vacas flacas, los criterios ESG podrían verse como un lujo. Sin embargo, esa óptica se aleja de la realidad. Estamos convencidos que la aplicación de políticas ambientales, sociales y de gobernanza son una inversión, pues incrementan la productividad de los trabajadores y permiten que las empresas puedan modernizar sus modelos de negocios con una visión de futuro.

Medidas como la circularidad económica, el uso eficiente de los recursos y la diversificación en las cadenas de suministro son indicadores examinados minuciosamente por los inversionistas en épocas de crisis. Las compañías que aplican estas políticas no solo evidencian un profundo compromiso hacia su entorno, sino que además revelan una estrategia a largo plazo enfocada en disminuir los riesgos medioambientales y que permitirá mejoras en su rentabilidad.

El Dow Jones Sustainability Index es el instrumento más importante para medir la sostenibilidad de las firmas que cotizan en bolsa. En su rebalanceo del 2023, 27 empresas locales fueron seleccionadas en uno de los cuatro índices que tuvieron representación chilena. Se trata de compañías donde el cumplimiento de los criterios ESG se tornó en un objetivo crucial, pues entendieron que la incorporación de políticas sustentables en su gobernanza incorporan valor y rentabilidad social en su ADN.

Esta preocupación pudo reflejarse en los índices locales. Pese al escenario económico adverso, 23 de 25 empresas se mantuvieron en el DJSI Chile del 2023. Además, el 39% de las empresas del DJSI MILA -que incluye a Colombia, Perú, México y Chile- son firmas locales. Aún más destacable es el caso de SQM. La firma minera no sólo logró ingresar a los cuatro índices con representación chilena, sino que además fue incluida por primera vez en el DJSI World, el instrumento que representa al 10% superior de las 2.500 empresas de mayor tamaño del S&P Global BMI.

Tanto la permanencia como la inclusión de firmas chilenas en los índices del DJSI reflejan el acertado camino que han adoptado para enfrentar las crisis. Al incorporar políticas sostenibles, las organizaciones son capaces de resistir mejor los embates externos, inculcando la resiliencia en el ADN de todos sus integrantes y desarrollando una mirada de largo plazo, estrechamente vinculada con su entorno.

* La autora es Regional Director de Corporate Citizenship-SLR

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