El australiano Ben O’Connor ganó la 17ª etapa del Giro de Italia en la estación de Madonna di Campiglio, en los Alpes, pero es el puerto de Stelvio, este jueves, el que se espera se convierta en protagonista de la competencia ciclista.

El hito se levanta ante el portugués Joao Almeida, aún al frente de la general. “La etapa de hoy fue realmente difícil, con largas ascensiones, pero tenía el equipo perfecto conmigo. Tengo la maglia rosa gracias a ellos”, declaró el luso.

Si quiere ganar el Giro el domingo en Milán, Almeida deberá resistir en las pendientes del mítico puerto italiano, uno de los más altos de Europa con sus 2.758 metros sobre el nivel del mar. Para el portugués, de rosa desde la tercera etapa, la jornada reina será decisiva habida cuenta de que la otra de montaña, el sábado, quedó mutilada al prescindir de su recorrido por Francia.

Un día después de su segundo puesto en San Daniele del Friuli, donde fue superado en el último kilómetro por el esloveno Jan Tratnik, O’Connor no tardó en tomarse su revancha. El oceánico superó por 31 segundos al austríaco Hermann Pernsteiner, un compañero de Tratnik, y en más de un minuto al belga Thomas De Gendt.