Argentina fue protagonista en los primeros instantes del capítulo final de Lollapalooza Chile 2018. Ayer al mediodía, mientras el Parque O'Higgins abría sus puertas para recibir a miles de personas que llegaron a disfrutar del tercer día de festival, la versión trasandina del evento anunciaba la cancelación de su jornada con imágenes que daban cuenta de tormenta, aguacero y escenarios colapsados por los problemas climáticos. Una coyuntura que rebotó en la cita local y que la hizo enfrentar su propia tormenta. Pero en este caso, no era como consecuencia del mal tiempo: los problemas en Buenos Aires hicieron que muchos instrumentos y cargamentos técnicos no se pudieran embarcar en el horario acordado, lo que derivó en una serie de cambios y reprogramaciones que, sobre todo ayer, dejaron en el olvido la parrilla original.

Pero la tormenta de cambios tenía guardado un chaparrón mayor: Liam Gallagher se bajó del escenario e interrumpió su presentación al cuarto tema, debido a supuestos problemas vocales. Pese a los entuertos, el saldo es positivo: la edición 2018 se despide con un récord de convocatoria y la prueba superada de debutar en un día hábil. Al cierre, las turbulencias de la tormenta ya se habían diluido y en la memoria quedan postales de pura intensidad, como Mac DeMarco arrojándose al público en su show.