"Hay muchos de ellos (videos) que son falsos, que son filmados fuera de Chile o que son tergiversados y, por tanto, sin duda que aquí hemos debido enfrentar una campaña de desinformación que es muy difícil de contrarrestar, porque ha habido poca capacidad de los medios de comunicación de verificar la verdad". Con estas palabras el Presidente Sebastián Piñera hacía alusión a registros audiovisuales sobre violaciones a los derechos humanos que han sido viralizado por redes sociales desde el inicio del estallido social, el pasado 18 de octubre.

El Mandatario -en una entrevista a CNN Español que se viralizó ayer por Twitter, pero que fue realizada el 11 de diciembre y publicada cuatro días después- volvió a insistir en la tesis sobre la injerencia extranjera en los hechos de violencia. "La campaña de desinformación, de noticias falsas, de montajes para crear una sensación de un desorden y de una crisis total ha sido gigantesca. En eso ha habido, sin duda, participación de gobiernos e instituciones extranjeras", dijo.

Las declaraciones del Jefe de Estado generaron cuestionamientos inmediatos en redes sociales, en la oposición e, incluso, en el propio oficialismo. En La Moneda -si bien defendían que la entrevista fue realizada hace varios días atrás "cuando la hipótesis de la injerencia extranjera estaba en su punto más alto"- reconocen que las últimas intervenciones del Mandatario han terminado complicando el escenario político.

En la lista se incluye la entrevista del Mandatario a la BBC cuando defendió el procedimiento de Carabineros en las marchas y aseguró que "también he estado allí" en las protestas, y luego la que dio a las radios agrupadas en ARCHI la semana pasada, cuando aseveró que había influencia extranjera tras la ola de violencia. Ello derivó en un enfrentamiento con el Ministerio Público, que sostuvo no tener esos antecedentes, y en el consecutivo envío del informe sobre "Big Data" del Ejecutivo al Fiscal Jorge Abbott, el que fue ampliamente cuestionado.

En ese sentido, son varios en Palacio que creen que Piñera debiera tener menos apariciones públicas y que, cuando las realiza, debiera enfocarse en proyectar "hacia dónde va el gobierno" y no apuntar a tesis que aún no han sido comprobadas por el Ministerio Público y que, más aún, han sido cuestionadas por el mismo organismo.

En abril pasado, meses antes del estallido social, había preocupación en Palacio por las múltiples apariciones de Piñera en entrevista con matinales. Hasta esa fecha ya registraba 13 asistencias, lo que inquietaba a varias autoridades debido al "alto riesgo" que implicaba y a los errores que estaba expuesto.

Con todo, en el Ejecutivo afirman que la tesis sobre la influencia extranjera en los hechos de violencia registrados en el país, no es una idea que provenga solo del Mandatario, sino que también sería compartida por el jefe de asesores del Segundo Piso, Cristián Larroulet, y por el ministro de Defensa, Alberto Espina. El primero, según publicó La Tercera Domingo, ha realizado exposiciones en diversos ministerios en los cuales apunta a motivar a las huestes de gobierno, al tiempo que ha apuntado el interés que tendría el Foro de Sao Paulo -que agrupa a distintas colectividades de izquierda de América Latina- para desestabilizar el modelo chileno.

Consultados por La Tercera PM, varios dirigentes del oficialismo prefirieron no dar su opinión al respecto. Sin embargo, el presidente de Evópoli, Hernán Larraín Matte, dijo que "la grave situación que ha vivido Chile en materia de DD.HH. nos obligan a todos, partiendo por el Presidente, a ser muy responsables con nuestras declaraciones. Son los tribunales los que deben investigar, establecer las pruebas y sancionar". En tanto, el jefe de bancada de RN, Jorge Ratgheb, indicó que "si el Presidente ha señalado eso es porque efectivamente hay indicios de situaciones de esa naturaleza y que tienen que investigarse".

Por su parte, el senador RN Manuel José Ossandón publicó "Basta" vía twitter. Posteriormente, fue más crítico y profundizó en La Tercera señalando que las esas "declaraciones no ayudan, relativizan y dividen. Basta de eso, pero la culpa no es sólo del Presidente, sino de un grupo de asesores que día a día deben decirle que el desgaste sigue siendo la fórmula. Es hora de unir y empatizar con todo lo vivido".

Esta misma tesis generó que el gobierno abriera un nuevo flanco al entregar a la Fiscalía -con el objetivo de comprobar sus hipótesis- un informe con recopilación de información de redes sociales hecho con herramientas de Big Data, el que ha sido duramente cuestionado debido a que no se ha señalado quién es la persona que lo elaboró: La Moneda se ha restado a decir que provino de la ANI y que, por lo tanto, deben mantener la reserva de la fuente.

El hecho generó, según reconocen en Palacio, un "gran problema" comunicacional y molestia al interior del propio gobierno. Esto, porque, dicen, se intentó apuntar como responsable a la Secom y a su director Jorge Selume, desde donde descartan tener cualquier responsabilidad. El error, dicen algunos, habría sido del ministro del Interior, Gonzalo Blumel, por decidir entregar esa información.

Esta mañana, en entrevista a radio Infinita, el titular de Interior afirmó que el "informe simplemente fue compartido para generar elementos de contexto que pudiesen facilitar las investigaciones penales, pero no constituyen pruebas necesariamente ni muchísimo menos". "Cuando tú estás señalando que un informe de Big Data constituyente un informe de inteligencia, son dos cosas que no tiene relación", añadió.

Más allá de eso, los dichos del Presidente reavivaron la polémica y los ministros Blumel y Karla Rubilar (Segegob) tuvieron que salir hoy a respaldar los dichos del Mandatario.

"En la entrevista que dio el Presidente Piñera, él comenta respecto a lo que son las fake news, que son noticias que aparecieron como noticias que eran de otros tiempos, de otros sucesos y algunos videos que no eran en Chile, sino fuera de Chile", manifestó Rubilar, añadiendo que "en esa misma entrevista el Presidente dice de forma fuerte y clara que reconoce las vulneraciones a los derechos humanos y que no habrá impunidad". Y añadió: "Les pido ver la entrevista entera del Presidente al medio en cuestión".

Más temprano, el ministro Blumel dijo, en entrevista con radio Infinita, que "efectivamente hay mucha información que no es veraz, que es falsa, que circula por redes, que circula por medios que muchas veces no nos damos el tiempo de verificar".

El titular del Interior, además, justificó sus dichos dando ejemplos de "fake news", por ejemplo, sobre el supuesto centro de tortura en Baquedano y en el mall de Quilicura. De todas formas, en La Moneda afirman que el gobierno intentó aclarar que cuando Piñera dice que "hay muchos de ellos (videos) que son falsos", es a que se muestran registros en protestas en otras partes del mundo y que no se refiere a que se graban videos falsos.

El reclamo a Piñera por el video del proceso constituyente

Los problemas de comunicaciones también se discutieron con fuerza en la reunión del pasado lunes en la casa de Piñera, donde llegó un grupo de senadores oficialistas junto a los ministros Blumel y Felipe Ward (Segpres).

Esta vez la incomodidad era por el video que se mostró en la ceremonia del lunes en la promulgación del proceso constituyente.

Según relatan, el cuestionamiento vino principalmente desde el senador Andrés Allamand (RN) quien habría preguntado por la autoría del video ya que, a su parecer, éste sería "sesgado" y que fomentaba la opción "apruebo" del plebiscito del 26 de abril.

A la crítica se sumaron los senadores de la UDI que estaban presentes, Juan Antonio Coloma y Víctor Pérez, quienes estimaron que el registro era casi una "propaganda" de la oposición para promover una nueva Constitución. De hecho, se hizo ver, que el video comienza con el presidente del Senado, Jaime Quintana (PPD), diciendo que se tendrá "por primera vez, una Constitución 100% democrática".

Tras la crítica de la UDI –donde la gran mayoría del partido está por la opción "No" en abril- y de Allamand –quien aún mantiene en duda su votación en el plebiscito- , según cuentan los asistentes a la cena, Piñera llamó a su jefa de gabinete, Magdalena Díaz, para preguntar quién había hecho el video pues él no lo había visto antes de la ceremonia, algo que también dijo el ministro Blumel. Desde La Moneda afirmaron hoy que éste fue realizado por el equipo de Prensa de la Presidencia.