“No está en mis planes ser candidata”. Esa es la afirmación que la ministra vocera de gobierno, Camila Vallejo (PC), le ha hecho a algunos diputados de la bancada de su partido y a los más cercanos de su equipo.

De esta manera, la secretaria de Estado ha buscado echar por tierra la idea ya instalada de que ella es la carta natural del PC de cara a las próximas elecciones presidenciales de 2025. Y de que existiría soterrada pugna con la ministra del Interior, Carolina Tohá (PPD), que suena también como la eventual candidata del Socialismo Democrático.

La posibilidad de que Vallejo sea carta a La Moneda ha provocado constantes emplazamientos de la oposición y las críticas de algunos sectores del oficialismo, que bajo cuerda critican su gestión como vocera, aduciendo que se protege de exponerse ante los conflictos que enfrenta el gobierno.

Cercanos a la exdiputada por La Florida hacen una afirmación adicional: aseguran que la ministra hace un tiempo tuvo una conversación sincera con el Presidente Gabriel Boric, en la que se transmitió que tiene la intención de acompañarlo hasta el final en su mandato. La misma versión le entregó Vallejo a su equipo en una reciente reunión de planificación.

En el gobierno no hay discusión frente al hecho de que la ministra y militante del PC se ha convertido en la principal orejera del Mandatario. Ella y la ministra Tohá son, por lejos, las figuras más incidentes del gabinete, con el ingrediente adicional de que la ministra PC tiene una relación de amistad personal con el Presidente desde el movimiento estudiantil y es la única del elenco original del gobierno que permanece en La Moneda, luego de que el exministro Giorgio Jackson saliera en agosto del año pasado y la ministra del Interior Izkia Siches fue reemplaza por Tohá a los seis meses de su gestión.

Ante la preocupación de que en octubre, cuando quede un año para las elecciones parlamentarias, varias autoridades del gobierno renuncien a sus cargos para ser postulantes al Congreso como dicta la ley, la vocera ha planteado que es importante que el Presidente termine su gobierno de buena manera y que para eso es necesario que el gabinete no se desarme.

Así lo dijo también en una entrevista el 4 de abril en CNN. Al ser consultada por la posibilidad de asumir una eventual candidatura respondió: “No, y no quiero ni siquiera hacerlo, porque tengo claro cuál es mi trabajo en este momento, acompañar al Presidente Gabriel Boric”. Y agregó: “Yo acompaño al Presidente hasta el final”.

Vallejo les ha transmitido a sus cercanos del partido que está dispuesta a dar una discusión política si es que le piden asumir como candidata presidencial dada su presencia en las encuestas, aunque con escasos números. En la última Cadem marcó 3%, mientras que Tohá figura con 2% y la expresidenta Michelle Bachelet, con 4%.

La ministra en la vocería del lunes.

Parlamento

Así como en privado dice que no está interesada en la carrera presidencial, Vallejo ha sido enfática en descartar cualquier posibilidad de retornar al Congreso ni como senadora ni menos como diputada. En sus espacios de confianza ha dicho que es una decisión tomada y que no tiene vuelta atrás.

No sería primera vez que la ministra se enfrenta a su partido para definir su futuro. Antes de la última elección parlamentaria, Vallejo tuvo que defender su posición para no ir de candidata por tercera vez al Parlamento. Quería darse un tiempo para descansar y estudiar. Por eso inició un magíster en gobierno, políticas públicas y territorios en la Universidad Alberto Hurtado.

En su rol como vocera se ha alejado de las discusiones del partido, con el que ha tenido algunas diferencias, como, por ejemplo, al referirse a la situación política de Venezuela luego de que el presidente del PC, Lautaro Carmona, declarara que es una democracia “a mucha honra”.

Vallejo también ha enfrentado controversias soterradas con el Socialismo Democrático, debido a la posibilidad de que sea candidata. La última polémica fue cuando el Presidente la nombró como ministra enlace -rol que mantiene hasta hoy- en el incendio en Valparaíso en febrero. Ahí reemplazó a la ministra de Defensa, Maya Fernández (Partido Socialista), lo que le valió reclamos del Socialismo Democrático, sobre todo del PS, donde acusaron que en la nominación había un interés escondido por potenciarla electoralmente en la Región de Valparaíso y que enredaba el desempeño de los otros ministros desplegados en la zona, como Carlos Montes (Vivienda) y Javiera Toro (Desarrollo Social). El episodio obligó a Vallejo a hacer llamadas y enviar mensajes aclarando que no pidió tal nombramiento.

Si efectivamente la ministra Vallejo se autodescarta de la carrera presidencial, el Partido Comunista queda en el dilema de encontrar otra carta. El alcalde de Recoleta, Daniel Jadue, que enfrentó al Presidente Gabriel Boric en la primaria, enfrenta un proceso de formalización de la Fiscalía por cohecho, estafa, fraude al Fisco y administración desleal.

En ese escenario ya empieza a sonar el nombre de la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, quien es cercana a Vallejo y es parte del comité político.

De hecho, la vocera ya le ha hecho algunas bromas a su par del gabinete. “¿Vas a ser candidata?”, le ha dicho. La ministra del Trabajo solo ríe.